El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, contradijo este lunes la declaración del titular de Economía, José Arista, y proclamó la solidez del Gobierno de la presidenta Dina Boluarte, contrario a que lo había dicho su homólogo horas antes.
“Nuestra fortaleza es trabajar por el país, desarrollando las obras que el Perú requiere. La ventaja que tenemos es que no somos parte de un partido político específico. La presidenta no está pensando en su futuro político y en ningún tipo de reelección. Tenemos un Poder Ejecutivo fuerte, en cuanto a que tiene claras las cosas que tiene que hacer”, señaló Pérez Reyes en diálogo con Canal N.
“Somos un gobierno que no tiene bancada parlamentaria, pero tenemos el instrumento de la ejecución de las obras y, en ese sentido, estamos implementando un conjunto de obras por encargo de la presidenta para ayudar a mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos”, siguió.
Arista había admitido que el Ejecutivo carece de fortaleza para contrarrestar la reciente rebaja de la agencia internacional Standard and Poor’s, que redujo la calificación crediticia soberana a largo plazo en moneda extranjera de Perú a ‘BBB-’ desde ‘BBB’. “No tiene la fuerza suficiente para generar un balance en la parte política. [Es un gobierno débil], definitivamente”, señaló en una entrevista concedida a RPP.
El titular de Transportes discrepó con esta postura y mencionó, por el contrario, que la administración de Boluarte “está impulsado obras emblemáticas que han estado por mucho tiempo no abordadas” como la nueva Carretera Central, el Aeropuerto Internacional de Chinchero y la nueva terminal del Aeropuerto Jorge Chávez de Lima.
“[Además, hay] 15 proyectos para concesiones viales en la modalidad de APP [Asociaciones Público Privadas] y estamos trabajando un paquete de casi 37 mil millones de dólares de inversiones, particularmente en vías ferroviarias, en la nueva Carretera Central”, añadió.
En la misma entrevista, Arista destacó el creciente desbalance de poderes como una de las causas principales del incremento en el gasto corriente en años recientes, lo que ha repercutido negativamente en el déficit fiscal del país. “Tenemos un déficit que se ha mantenido en 2% – 2.8%. El último ministro [del MEF] que generó un superávit fue Luis Miguel Castilla, después de eso no hemos tenido superávit fiscal. De eso han pasado más de 10 años”, dijo.
Asimismo, hizo referencia a la práctica de solicitar al Congreso ajustes en la regla fiscal ante la imposibilidad de cumplirla, una medida que ha sido tomada en varias ocasiones. “Solo dos a tres veces se ha roto la regla. La última fue mi antecesor Alex Contreras”, subrayó.
