La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado este lunes la agresión sufrida el pasado domingo 12 de mayo por el personal sanitario del Punto de Atención Continuada (PAC) del centro de salud de Villacañas (Toledo). Según relata el sindicato, el equipo “recibió insultos y amenazas de muerte por parte de una mujer”.
Los hechos tuvieron lugar pasada la medianoche del sábado 11 de mayo, sobre las 00:30 horas. “La agresora acudió al centro de salud con su hija, menor de edad, solicitando atención médica para la pequeña por síntomas de alergia respiratoria mientras mantenía al mismo tiempo una videollamada”, ha explicado CSIF en un comunicado. Tras tomarle los datos, el personal “le comunicó hasta en tres ocasiones que debía colgar el teléfono” para poder acceder a la consulta médica.
Te puede interesar: Aumentan en 2023 un 30% las agresiones a sanitarios, más de la mitad a mujeres
“Ella respondió con una actitud desafiante, comenzando entonces con faltas de respeto e insultos y pasando a continuación a proferir amenazas”, han relatado. La mujer se habría dirigido a cuatro de las sanitarias del centro con expresiones como “te voy a matar” o “te voy a sacar las tripas”.
El botón del pánico no funcionaba
Ante esta escalada de tensión, las cuatro sanitarias, claramente asustadas, fueron a pulsar el botón del pánico, pero este no funcionaba, ha asegurado CSIF. Las profesionales tuvieron que llamar a la Guardia Civil y refugiarse en el pasillo que da acceso a las consultas. Esta zona se encuentra cerrada por una puerta de madera con cerrojo, “pero la agresora logró abrirla con una fuerte patada”.
“Pensábamos que nos iba a pegar a todas”, han asegurado en declaraciones al sindicato al sindicato. Finalmente, la agresora salió del centro, pero el episodio no quedó ahí. Volvió poco después con un familiar, en la misma actitud desafiante, por lo que las trabajadoras cerraron la puerta exterior del centro hasta la llegada de la Guardia Civil.
El personal agredido ha interpuesto una denuncia y ha pedido a la Gerencia de Atención Integrada de Alcázar de San Juan, a la que pertenece el centro, una reunión para reclamar medidas.
Te puede interesar: El 80% de las enfermeras en España sufre ‘burnout’: provoca agotamiento físico y mental
“Las amenazas son habituales en este PAC”
La central sindical ha calificado el episodio de “especialmente grave”, tanto por la avería del botón del pánico, “una herramienta fundamental para actuar con rapidez en este tipo de situaciones y que necesita de revisión periódica”, como por la nula garantía a la seguridad del personal del centro, “máxime cuando las propias trabajadoras relatan que las amenazas e insultos son habituales en este PAC”.
CSIF ve “totalmente insuficientes” el cerrojo de la puerta de acceso a las consultas o la cámara de vigilancia que posee el PAC, “dirigida al aparcamiento y que no funciona”. Ambas fueron implantadas tras una agresión a una médica del centro. Igualmente, han exigido la incorporación inmediata de personal de seguridad y un celador.
Desde el Sindicato Médico de Castilla-La Mancha (CESM CLM), han condenado igualmente la agresión. “Queremos expresarle a nuestras compañeras facultativas y de enfermería nuestro apoyo, ayuda y cariño ante un hecho tan grave y lamentable que no se puede justificar de ninguna manera. No concebimos un ambiente laboral en el que esté presente el insulto, la descalificación, el intento de humillación o cualquier otro tipo de agresión física, verbal o psicológica”.
El sindicato ha exigido al SESCAM (Servicio de Salud de Castilla-La Mancha) “que adopte las medidas efectivas para evitar que se sigan produciendo estas agresiones” y se persone como acusación particular ante estos episodios. Han solicitado además “la presencia de Vigilancia Jurada” en el centro afectado.