En la localidad de San Cristóbal, a Sur de Bogotá, dos agentes de la Policía fueron captados en video cuando golpearon a un perro callejero mientras se desplazaban en su motocicleta. Según se puede ver en las imágenes, los uniformados pertenecen al CAI Guacamayas, lo que generó un fuerte rechazo por parte de las autoridades, que ya lanzaron un comunicado frente al caso.
Varios testigos del suceso grabaron videos que muestran cómo los agentes golpeaban a la perra con un bolillo, la cual les ladró cuando ellos iban en su motocicleta, por lo que ellos se regresaron para emprender el acto violento. Los ciudadanos presentes en el lugar expresaron su indignación y recriminaron a los uniformados por su comportamiento; sin embargo, la situación se tornó aún más tensa cuando la policía amenazó a una señora que protestaba por lo ocurrido.
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La comunidad informó que los perros mencionados son llamados “Negra” y “Trapito”, aunque en los videos se evidencia que el principal objetivo de los uniformados fue la perra de color negro, a pesar de la presencia de otro perro de color amarillo.
Ante esta situación, el mayor Jimmy Cortés, vocero de la Policía Metropolitana de Bogotá, emitió un mensaje en el que condenó enérgicamente los actos cometidos por los dos funcionarios de la fuerza púbica.
De esta manera expresó: “La Policía Nacional rechaza de manera contundente estos actos inapropiados realizados por dos funcionarios de la Policía Nacional en la localidad de San Cristóbal, en el barrio San Miguel, los cuales ocasionaron una lesión a este canino que ha sido adoptado por la comunidad. Los carabineros de Colombia nos encontramos el día de hoy solidarizando con la comunidad y con todos los ciudadanos del sector para velar por la protección y el cuidado de estas dos perritas”.
Igualmente, el mayor indicó que iniciarán las investigaciones correspondientes y aplicarán las medidas necesarias en respuesta a los actos que fueron registrados y difundidos a través de las redes sociales: “Asimismo, a partir del momento, serán aperturadas las investigaciones disciplinarias a que haya lugar”.
Asimismo, el mayor se dirigió a la comunidad y expresó preocupación en nombre de la institución y enfatizó que su responsabilidad era el bienestar de todos, asegurando que estarían vigilantes de la situación.
“Venimos precisamente a poner la cara, a mirar el estado de los animales desde nosotros, los Carabineros, pues obviamente les vamos a prestar la atención en estos días; ya mañana, incluso mañana mismo voy a enviar un veterinario que nos lo revise bien, les traemos algunas cositas para desparasitarlos y pues también informarles a ustedes que a partir de hoy los policías serán investigados tanto disciplinariamente como penalmente por la actitud que cometieron entonces, pues queríamos también informarles a ustedes de la comunidad de eso (sic)”, señaló el mayor.
Así se registró el acto violento de los patrulleros
El viernes 10 de mayo tuvo lugar un incidente de maltrato animal que ha causado indignación en la comunidad. Dos agentes de policía, mientras transitaban en su motocicleta por una calle de San Cristóbal, fueron confrontados por una perra callejera que les ladró.
En un video grabado por una cámara de seguridad, se observa cómo los policías, en una maniobra cobarde, vuelven a pasar junto al animal y uno de ellos lo golpea brutalmente en la cabeza con un bolillo o tonfa.
Este suceso no pasó desapercibido para los habitantes del barrio. Una mujer que presenció la agresión confrontó valientemente al policía por su acto cruel contra el indefenso animal. Aunque el agente argumentó haber sido víctima de un presunto ataque por parte del perro, más ciudadanos se sumaron a reprocharle su vergonzoso comportamiento.
El video de la agresión se viralizó en redes sociales, lo que provocó una oleada de indignación y demandas de que los agentes involucrados reciban un castigo ejemplar. Además, generó un debate sobre los compromisos y capacidades que deben tener los policías en el ejercicio de su deber.
Si bien se espera que garanticen la seguridad ciudadana, acciones como esta evidencian que hay personal dentro de la institución que no está preparado para cumplir adecuadamente con su rol como agentes de seguridad, de acuerdo con las denuncias de la comunidad.
