La empresa Grifos Espinoza S.A., propietaria de la estación de servicio donde se registró la explosión que dejó un muerto y 54 heridos, se embolsó S/1.573.000 del erario público en febrero último, al obtener un contrato como postor único por parte de la Municipalidad de Villa María del Triunfo, bajo la gestión del alcalde Eloy Chávez.
Según un informe difundido este martes por Canal N, la comuna adjudicó el contrato, a pesar de que la suma excedía en más de 9.000 soles el valor contemplado en el proceso para adquirir 904 mil 102 metros cúbicos de gas natural para los vehículos municipales.
El acuerdo fue suscrito en marzo pasado entre la subgerencia de Abastecimiento de la municipalidad y Francisco Ponte, gerente general de Grifos Espinoza. De acuerdo con el reportaje, se trata de la única adjudicación otorgada hasta la fecha por la gestión de Chávez, quien milita en las filas de Alianza Para el Progreso (APP).
En Villa El Salvador, distrito colindante a Villa María del Triunfo, la empresa de Pedro Espinoza y Julia Ardiles obtuvo cinco contratos por un total de más de nueve millones de soles entre 2023 y 2024. En rigor, la administración villa salvadoreña, a cargo del alcalde Guido Iñigo ―también de APP—, adquirió gas natural vehicular, diésel y gasohol de esta compañía, que opera desde 1990.
La explosión ocurrió poco antes de las 17:00 horas del lunes durante la carga de gas natural comprimido (GNC) en una cisterna en la estación de servicio, según el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería. Las imágenes mostraron instalaciones semidestruidas, ómnibus con vidrios rotos y escombros en casas cercanas, incluido un gran balón de gas empotrado en una vivienda.
Un día después del incidente, que llevó al Gobierno a anunciar estado de emergencia en cuatro distritos, el olor a gas persistía en las calles cercanas y los residentes lamentaron que se había denunciado el riesgo previamente. La Municipalidad de Villa María del Triunfo anunció la clausura definitiva de la estación, mientras la Municipalidad Metropolitana de Lima inició el empadronamiento de las familias afectadas.
Según Mario Casaretto, gerente de Gestión del Riesgo de Desastres, al menos 42 hogares están gravemente dañados, además de otras viviendas en lomas y cerros impactadas por las ondas expansivas. El único fallecido fue el conductor de la cisterna que abastecía de GNV al grifo.
Los heridos, atendidos en hospitales y centros de salud locales, ya han sido dados de alta. Las clases en algunos colegios fueron suspendidas y el Ministerio de Trabajo instó a los empleadores a otorgar flexibilidad a los trabajadores cercanos al lugar del incidente.