La Fiscalía General de la Nación imputó cargos el jueves 30 de mayo de 2024 a Enrique Pardo Hasche y al abogado Samuel Arturo Sánchez, que de acuerdo con el ente acusador están involucrados en los procesos que cursan en contra del expresidente de la República Álvaro Uribe Vélez y el que fue su abogado, Diego Cadena, que afrontan sendos juicios ante las denuncias del exparamilitar Juan Guillermo Monsalve.
El representante del órgano de investigación judicial endilgó a los dos hombres el delito de soborno en actuación penal, en relación con los procesos penales que vinculan al también exsenador, que afronta juicio por el mencionado punible, además de los delitos de fraude procesal y soborno. Una diligencia que había sido programada desde el 11 de abril, cuando se supo de la determinación.
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“Las presiones que ejercía el señor Pardo Hasche desde el interior de la celda del señor Juan Guillermo Monsalve se basaron en el sentido de decirle que se aliara al ‘mejor bando posible’, ‘que Álvaro Uribe era dios en la tierra’”, explicó el fiscal del caso, Daniel Hernández (…) “Que él tenía que acogerse a los ofrecimientos que le había hecho el doctor Diego Cadena, pues provenían de Álvaro Uribe Vélez”, destacó.
A su vez, fiscal mencionó que entre los beneficios que le fueron ofrecidos a Monsalve resalta que su expediente de Juan Guillermo Monsalve fuera analizado por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), entre otras prebendas. “Se buscaba generar una presión en el ciudadano. Un miedo que lo llevara a tomar la decisión de enviar, retractar y falsear su declaración”, afirmó Hernández.
Los imputados no aceptaron los cargos en su contra, que podrían enfrentarlos a penas de máximo 12 años de prisión en caso de ser encontrados culpables.
¿Por qué fueron imputados Pardo Hasche y Sánchez Cañón?
Los dos sujetos procesales están relacionados con los episodios que buscan obtener testimonios que desvirtuaran los señalamientos del hoy senador Iván Cepeda contra Uribe Vélez, acerca de sus presuntos nexos con los paramilitares. En especial, en con el Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), en proceso por el que el ex jefe de Estado afronta en la actualidad un juicio ante los tribunales.
En febrero de 2023 Pardo Hasche recibió el beneficio de libertad condicional en el marco de su condena de 29 años, vigente desde 1997, por el secuestro del empresario Eduardo Puyana. Pardo Hasche es conocido porque habría presionado a Monsalve para retractarse en sus señalamientos contra Uribe Vélez, además de ser el organizador de las reuniones entre el exparamilitar con el abogado Cadena, y el portador de mensajes que enviaría el exrepresentante Álvaro Hernán Prada, cercano al exmandatario.
De acuerdo con información divulgada por el periodista Daniel Coronell, Sánchez Cañón fue el receptor de los giros del exsenador Mario Uribe Escobar, primo del exmandatario, y la persona que llevó a Cadena al exparamilitar Vélez.
Este sujeto también afirmó que el apoderado de Uribe Vélez le giró una suma de dinero para declarar a favor del expresidente y negar las acusaciones en su contra, sobre su relación con el mencionado grupo armado ilegal, responsable de las masacres de El Aro y La Granja.
“Las ‘hermanitas de la caridad’ estaban dando plata. Los recibos se los mostré a la Corte. Los abogados dicen que eso fue humanitario, pero no es verdad; ahora ellos son los abogados de la caridad. Querían hacerme firmar un papel diciendo que había sido una beneficencia. Yo les dije: ‘no voy a firmar eso’. Uno no es pendejo, he sido bandido”, indicó Vélez en diálogo con Coronell, en diálogo que se publicó en marzo de 2020 en Semana.
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