Leticia Martinez Perez, de 24 años, ha sido arrestada por la policía de Glendale, Arizona, acusada de robar ropa interior valorada en más de USD 14.000 dólares de tiendas Victoria’s Secret. Las autoridades informaron que entre noviembre y marzo se registraron nueve incidentes de hurto en diversas tiendas de la ciudad y las urbes aledañas. La mujer, a quien las autoridades apodaron la “ladrona de tangas”, admitió vender la ropa interior robada para obtener ganancias.
La serie de robos comenzó el 29 de noviembre en el Desert Sky Mall. Según los registros policiales, Pérez delinquió tras recibir información de que había pocos empleados trabajando en dicha tienda de Victoria’s Secret, lo cual facilitaba el robo. La acusada relató a la policía que esta información le llevó a considerar el local como un objetivo fácil.
Según KOLD, afiliada de CBS News, los atracos cometidos por la mujer se realizaron sin ayuda de terceros, sin embargo, en el último incidente, ocurrido el 20 de marzo en el edificio Arrowhead Mall, contó con la ayuda de un cómplice masculino.
El hombre fue identificado gracias a imágenes de seguridad proporcionadas por la tienda. Según las mismas fuentes, el sujeto reconoció su presencia en las fotos junto a Pérez, pero afirmó no recordar el incidente con claridad y no saber qué hizo ella con la ropa robada; sospechaba que ella obtenía dinero por los artículos sustraídos.
USA Today reportó que, tras su arresto el 15 de mayo, Pérez confesó su participación en los hurtos cuando se le mostraron las imágenes de cada uno de los nueve incidentes. Relató a las autoridades que su modus operandi consistía en entrar en las tiendas con la intención de robar para luego vender los artículos y financiar su consumo de drogas o pagar una noche de hotel.
Según los registros policiales, personas en la calle también le solicitaban a la mujer ciertos artículos específicos, los cuales ella encontraba en las tiendas y vendía.
Los detalles sobre los métodos de Pérez y sus motivaciones subrayan una problemática subyacente: “Sabía que lo que estaba haciendo estaba mal”, expresó la acusada tras ser arrestada. Esta afirmación, recogida en los informes policiales, reflejó la admisión de culpabilidad por parte de la joven. Como resultado de estos delitos, la sospechosa enfrenta 20 cargos de hurto organizado al por menor.
Este caso ha generado atención en la comunidad debido a la frecuencia y el valor de las mercancías robadas. Las autoridades locales han utilizado las redes sociales para difundir información sobre los arrestos. Tras la detención de Pérez, la policía de Glendale publicó en su cuenta de X una declaración singular: “No más ganancias de tangas para ella”.
Cabe destacar que, en el proceso de investigación, las imágenes de vigilancia resultaron cruciales para identificar y localizar a Pérez y a su cómplice. Las autoridades han incentivado a los comercios a mejorar sus sistemas de vigilancia como medida preventiva contra futuros incidentes de robo.
“Este caso ilustra la importancia de contar con medidas de seguridad adecuadas en las tiendas para prevenir robos y proteger la propiedad”, señaló un oficial de policía de Glendale a USA Today, subrayando el papel de la vigilancia y la colaboración entre las tiendas y las fuerzas del orden.
