El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, bajo control de Hamás, ha elevado este domingo a 274 los muertos y a 698 los heridos por la ola de bombardeos israelíes sobre el centro de Gaza en el marco de la operación de rescate lanzada por sus fuerzas en el campamento de refugiados de Nuseirat y que se saldó con la liberación de cuatro rehenes.
En un comunicado publicado en su página de Facebook, el Ministerio de Salud gazatí ha avisado de que la cifra de víctimas podría aumentar en las próximas horas porque muchos de los heridos se encuentran en estado crítico y hay muchas personas bajo los escombros.
Los rehenes fueron identificados como la joven Noa Argamani y tres hombres, Almog Meir Jan, Andrey Kozlov y Shlomi Ziv, todos ellos secuestrados durante el festival de música Supernova, uno de los principales objetivos del ataque de las milicias del 7 de octubre.
La operación, efectuada por el Ejército, el servicio de Inteligencia y seguridad interior israelí (Shin Bet) y la unidad antiterrorista Yamam de la Policía fronteriza se ha saldado con un comando de esta última fallecido, el inspector jefe Arnon Zamora, declarado muerto durante su hospitalización por las heridas sufridas durante la operación.
Las autoridades palestinas y países aliados han denunciado no obstante el bombardeo que acompañó a la operación como un ataque indiscriminado contra la población del campo de Nuseirat y de sus alrededores.