El Gobierno de China está ampliando su arsenal nuclear “más deprisa” que los otros ocho países que poseen este tipo de armamento — Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, India, Pakistán, Corea del Norte e Israel–, aunque todos ellos lo están incrementando o tienen planes para ello, según ha informado el Instituto Internacional de Investigación Sobre la Paz de Estocolmo (SIPRI).
“China está ampliando su arsenal nuclear más deprisa que ningún otro país. Pero casi todos los Estados con armamento nuclear tienen planes o un empuje significativo para aumentar sus fuerzas nucleares”, ha afirmado el investigador asociado del Programa de Armas de Destrucción Masiva del SIPRI y director del Proyecto de Información Nuclear de la Federación de Científicos Estadounidenses (FAS), Hans M. Kristensen.
De hecho, la organización estima que el arsenal nuclear chino ha aumentado de 410 ojivas nucleares a 500 entre enero de 2023 y 2024, una cifra que seguirá creciendo y que podría llegar a tener el mismo número de misiles balísticos intercontinentales que Rusia o Estados Unidos a finales de la década, aunque su arsenal nuclear seguiría siendo “mucho menor” que el de estos.
Moscú y Washington tienen en su poder el 90 por ciento de todas las armas nucleares del mundo y, aunque lo han mantenido estable a lo largo de 2023, la transparencia al respecto ha disminuido desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. Los dos países tienen unas 1.200 cabezas nucleares cada uno que han retirado del servicio militar para su desmantelamiento gradual.
Además, se estima que Rusia ha desplegado unas 36 ojivas más en sus fuerzas operativas, si bien no se pueden confirmas las afirmaciones rusas sobre el despliegue de estas armas en territorio bielorruso.
“Aunque el total mundial de cabezas nucleares sigue disminuyendo a medida que se desmantelan gradualmente las armas de la era de la guerra fría, lamentablemente seguimos observando aumentos interanuales en el número de cabezas nucleares operativas. Parece probable que esta tendencia continúe y probablemente se acelere en los próximos años, por lo que resulta extremadamente preocupante”, ha manifestado el director del SIPRI, Dan Smith.
A pesar de todo, los esfuerzos diplomáticos entre Pekín y Washington “parecen haber ampliado el espacio de diálogo” entre ambos países en materia de comunicación militar.
CASI 10.000 CABEZAS NUCLEARES LISTAS PARA SU USO POTENCIAL
Según las estimaciones del propio instituto, en torno a 9.585 cabezas nucleares del total de 12.121 existente en el mundo están en arsenales nucleares “para su uso potencial”, de las que 2.100 se encuentran en estado de alerta operativa alta en misiles balísticos. La mayoría de ellas pertenecen a Rusia y Estados Unidos, aunque se cree que China también está en este grupo por primera vez.
“Nos encontramos en uno de los periodos más peligrosos de la historia de la humanidad. Existen numerosas fuentes de inestabilidad, rivalidades políticas, desigualdades económicas, alteraciones ecológicas y una carrera armamentística acelerada. El abismo llama a la puerta y es hora de que las grandes potencias den un paso atrás y reflexionen. Preferiblemente juntas”, ha añadido Smith.
A esta situación ha contribuido la retirada de Rusia del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares tras denunciar un “desequilibrio” con Estados Unidos, aunque el Kremlin aseguró que seguiría siendo un país signatario. Al mismo tiempo, ha continuado aumentando su retórica nuclear en el contexto de la guerra de Ucrania y de un posible enfrentamiento con la OTAN.
Rusia también se retiró en febrero de 2023 del Tratado de 2010 sobre medidas para una mayor reducción y limitación de las armas estratégicas ofensivas (Nuevo START), por lo que Estados Unidos también decidió suspender el intercambio de datos.
“No habíamos visto a las armas nucleares desempeñar un papel tan destacado en las relaciones internacionales desde la guerra fría. Cuesta creer que hayan pasado apenas dos años desde que los líderes de los cinco mayores estados con armamento nuclear reafirmaran conjuntamente que ‘una guerra nuclear no se puede ganar y que nunca se debe librar'”, ha afirmado el director del Programa de Armas de Destrucción Masiva del SIPRI, Wilfred Wan.
AUMENTO DE LA CAPACIDAD NUCLEAR DE OTROS PAÍSES
Los gobiernos de India, Pakistán y Corea del Norte se encuentran buscando aumentar la capacidad de desplegar múltiples cabezas nucleares con misiles balísticos para ponerse a la altura de Rusia, Francia, Reino Unido, Estados Unidos y China.
Pyongyang ya cuenta con unas 50 cabezas nucleares y posee material para llegar a la cifra de 90, lo que supone un “aumento significativo” de las propias estimaciones del SIPRI de 2023 y, aunque no han realizado una explosión nuclear en todo el año, sí que han experimentado con lanzamientos de misiles balísticos de corto alcance o desarrollado misiles de crucero de ataque terrestre con capacidad nuclear.
“Al igual que otros Estados con armamento nuclear, Corea del Norte está poniendo un nuevo énfasis en el desarrollo de su arsenal de armas nucleares tácticas. En consecuencia, existe una creciente preocupación de que Corea del Norte tenga la intención de utilizar estas armas muy pronto en un conflicto”, ha aseverado el investigador asociado del Programa de Armas de Destrucción Masiva del SIPRI e Investigador Senior del Proyecto de Información Nuclear de la Federación de Científicos Estadounidenses, Matt Korda.
A pesar de que Israel no ha reconocido públicamente la posesión de armas nucleares, se cree que en la actualidad está modernizando su arsenal nuclear y mejorando reactor de producción de plutonio de Dimona.
De hecho, el inicio de la guerra en la Franja de Gaza ha socavado los esfuerzos de implicar a Israel en Conferencia sobre el establecimiento de una zona libre de armas nucleares y otras armas de destrucción masiva en Oriente Próximo, además de provocar una escalada de tensiones entre Irán y Estados Unidos.
Francia, por su parte, ha proseguido con sus programas tanto para desarrollar un submarino nuclear lanzamisiles balísticos de tercera generación como para un nuevo misil de crucero lanzado desde el aire, además de mejorar sus sistemas.
Aunque Reino Unido no parece haber aumentado su arsenal nuclear, se prevé que así lo haga, especialmente tras el anuncio en 2021 de aumentar sus cabezas nucleares de 225 a 260, y que pararía de revelar públicamente la cifra de ojivas desplegadas.