La volatilidad cambiaria en Argentina ha generado una serie de movimientos anticipatorios en el mercado, reflejando dudas sobre las políticas económicas actuales. Alejandro Díaz, CEO de Amcham, señaló que “la macro sigue siendo un desafío. Todavía hay un recorrido por hacer para nivelar y normalizar las variables macroeconómicas”.
El aumento reciente del dólar y el riesgo país, que ha superado los 1.500 puntos, son indicativos de la incertidumbre que rodea a la economía argentina. Díaz expresó que “estar a 1.300 o estar a 1.600 desde el punto de vista financiero es lo mismo, dado que estás afuera del mercado internacional de créditos. Lo que es como el termómetro, no es lo mismo tener 37 grados de temperatura que tener 41, y eso preocupa”.
Uno de los principales retos mencionados por Díaz es la necesidad del gobierno de encontrar una dinámica para transmitir confianza al mercado sobre sus planes futuros. “Acá la clave es que el gobierno encuentre una dinámica de transmitir a los mercados cuáles son los detalles de la fase 2, de manera tal que este proceso de licuación activa que ha dado su resultado y lo tenemos en la inflación, la reducción de la inflación me refiero, ahora se pueda cristalizar en la posibilidad de revertir el desarrollo de la economía a través de un progresivo crecimiento”, afirmó.
“Los mercados financieros siempre son sensibles y requieren a veces más certidumbre de la que probablemente un gobierno pueda dar”
La incertidumbre sobre el rumbo económico es otro factor que alimenta la volatilidad. “Los mercados financieros siempre son sensibles y requieren a veces más certidumbre de la que probablemente un gobierno pueda dar”, dijo Díaz. Sin embargo, también mencionó que “el mercado tiene que entender también que el proceso va a requerir probablemente una nueva fase y lo que pasa es que hay incertidumbre de cuál es el contenido claro de ese plan de sustentabilidad futuro”.
La especulación sobre el fin del cepo cambiario y el atraso cambiario son aspectos que generan aún más dudas. Según Díaz, “ambos aspectos son más que incertidumbre, que obviamente la crea, creo que lo que va a hacer es que la recuperación desde el punto de vista productivo no sea tan acelerada como muchos esperan”.
Díaz enfatizó que el mayor desafío es la recuperación de la economía real: “Desde la perspectiva productiva, que son las que nosotros normalmente manejamos, te diría que la preocupación es cuál va a ser el crecimiento que se da a partir de la economía real, el desafío está en la real economía”.
“La recuperación desde el punto de vista productivo [probablemente] no sea tan acelerada como muchos esperan”
Por último, reflexionó sobre la reacción del dólar y su impacto: “No sé si es un mensaje al gobierno, el gobierno va a tener que entender cuánto tiempo se va a demorar a partir de ese diferenciador que hoy tiene en términos del dólar oficial y el dólar financiero y ahí va a tener que articular las medidas que requiera para dar nuevas señales al mercado”.
En un contexto más amplio, Díaz mencionó las expectativas y el rol de la tecnología y la innovación en el desarrollo competitivo del país. “Este es un foro que toca no solamente el concepto de la tecnología per se, porque en el fondo la tecnología es una herramienta para producir cambios, sino la capacidad de hacer transformaciones culturales en búsqueda de un desarrollo competitivo de las empresas y en general del país”, concluyó.