Como parte de la ofensiva de las autoridades en Centroamérica, que buscan terminar con la presencia de criminales nacionales e internacionales en su país, en la frontera entre Honduras y El Salvador se registró la captura de un narco colombiano que era buscado por la Interpol.
Se trata de Edwin Arley Osorio Taborda, que fue detenido por la Policía Nacional Civil (PNC) cuando se encontraba en una zona que conecta a Danlí —ciudad hondureña del departamento de El Paraíso— y Pasaquina, que es un municipio de El Salvador.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
De acuerdo con lo informado por las autoridades de El Salvador, el sujeto, de nacionalidad colombiana, era requerido por la Interpol debido a que tiene una condena pendiente en su país por los delitos de tráfico, fabricación y porte de estupefacientes agravado.
De la misma forma, destacaron que durante varios meses había logrado burlar a las autoridades, pero tras su detención será extraditado a Colombia para que “pague por sus delitos”.
En el comunicado de la Policía Nacional Civil, destacaron que este tipo de delincuentes son cruciales en algunos aspectos para la movilización de la droga que sale de Colombia por Centroamérica y luego es distribuida a Estados Unidos, por lo que afirmaron que “Nuestro país no será refugio de delincuentes”.
Sobre su procedencia y los antecedentes de Osorio Taborda, destacaron que tiene 38 años, que es oriundo del municipio de Medellín, Antioquia y que su captura en Colombia se registró en diciembre de 2019, en una operación en la que también se registró el arresto de otro delincuente.
Debido a circunstancias que no han sido expuestas, fue dejado en libertad por vencimientos de términos, lo que aprovechó para seguir delinquiendo y también para escapar de Colombia, por lo que hasta la fecha no se tenía conocimiento de su paradero.
A pesar de ello, con las pruebas que había en su contra, en Colombia fue condenado en mayo de 2023 a 23 años de prisión por un juzgado de Medellín, que es el tiempo que deberá comenzar a cumplir cuando se registre su regreso al país.
“Las autoridades de la Interpol de Honduras han informado a sus contrapartes en Colombia sobre la expulsión del detenido en situación irregular”, indicó la Policía de Honduras sobre el proceso que permitirá que el delincuente vuelva al país sudamericano para cumplir con la condena que hay en su contra.
Este no es el único colombiano que ha sido capturado en uno de estos países centroamericanos, puesto que el 16 de julio el secretario de Seguridad de Honduras, José Zelaya, anunció la captura de tres colombianos que estaban intentando ingresar a su nación con 500 kilogramos de cocaína avaluada en seis millones de dólares.
Mientras que el 26 de junio se conoció que un colombiano había sido capturado pro las autoridades en El Salvador cuando se movilizaba en una lancha con dos toneladas de esta misma sustancia, motivo por el que podría pagar entre cinco y quince años de prisión, de acuerdo con el artículo 31 del Decreto 153 que especifica estas sanciones.
En lo corrido de 2024, en Honduras han sido incautados 6.700 kilos de cocaína; esto se debe a que estos países centroamericanos a lo largo de la historia han sido uno de los sitios de paso de los cargamentos que las estructuras colombianas y mexicanas han utilizado para transportar drogas.
De la misma forma, implementando las estrategias de seguridad con las que Nayib Bukele busca terminar con la presencia criminal en su país, en El Salvador, entre mayo y junio se registró la incautación de cuatro cargamentos de droga, lo que ha generado perdidas de hasta $140 millones de dólares a las estructuras delictivas.
