Quito, 19 jul (EFE).- El Foro Económico de la Mujer en Ecuador (WEF, por sus siglas en inglés) presentó este viernes, en Quito, las actividades que tendrán lugar el próximo 26 de septiembre, en la capital ecuatoriana, en el marco de la jornada ‘Legado, cooperación y progreso’, que busca reforzar la inclusión de las mujeres en el mercado laboral y en la dirección empresarial.
El Foro, que este año celebrará su cuarta edición en el país andino, reunirá a más de 59 ponentes de 14 países, quienes conversarán y debatirán con el público sobre liderazgo femenino, emprendimientos, negocios y transformación económica.
“En jefaturas, la presencia de la mujer es del 37 %, en gerencia, del 33 %, en vicepresidencias, del 24 % y cuando hablamos de dirección ejecutiva, éstas apenas representan un 19 %”, aseveró Catalina Cajías, directora de WEF Ecuador, en la presentación del Foro, que tendrá lugar en un hotel de Quito.
Además, mostró su preocupación porque uno de cada tres emprendimientos impulsados por mujeres no se sostiene en el tiempo, según dijo al apuntar que el fracaso de algunos de estos negocios no se debe sólo a un “tema de recursos”, sino a que “muchas de las emprendedoras tienen estudios hasta la secundaria y apenas un 13 % tienen estudios superiores”.
En líneas generales, matizó que “Ecuador ha dado grandes pasos en cuanto a cierre de brechas”, aunque reconoció que “aún hay un largo camino por recorrer”.
Una brecha salarial del 18 %
Cajías puso en valor la red internacional del Foro Económico de la Mujer, que nació en la India en 2015, ya que la lucha por la igualdad de género en el mercado laboral es global.
“En 86 países existen barreras laborales, en 175 todavía persisten barreras legales y en 96 países se mantiene la brecha salarial”, explicó.
Tras volver la mirada a Latinoamérica, anotó que en la región la brecha salarial alcanza el 25 %, un porcentaje que disminuye al 18 % en el país andino.
La directora de WEF Ecuador recordó también que durante las tres últimas ediciones lograron otorgar cuarenta becas para que mujeres ecuatorianas pudieran afianzar su liderazgo y crear emprendimientos.
Asimismo, agregó que llegaron a jóvenes de entre 14 y 18 años, a quienes formaron en competencias tecnológicas “para que al final estas niñas puedan ser líderes comunitarias”. Y apuntó que durante estos años han generado un impacto de más de 4 millones de dólares en el país.
Por último, formuló un llamamiento al Estado ecuatoriano a que contribuya a que la igualdad en el mercado laboral sea real, aunque concluyó que “cada uno puede coadyuvar dentro de este gran propósito de prosperidad”.
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