A veces, un pequeño fallo puede tener grandes e inesperadas consecuencias. Es lo que le sucedió este jueves a una mujer de 49 años en Ibiza. La situación no podía ser más cotidiana: arrancar el vehículo en un aparcamiento -situado en el tercer piso de un edificio- y salir de allí. Sin embargo, la conductora dio marcha atrás por error, rompió el muro del lugar y quedó con la mitad del vehículo suspendido en el aire desde esa tercera planta, ante el asombro de todos los que pasaban por allí. La imagen del suceso se ha convertido en uno de los eventos del día.
Según han informado el Diario de Ibiza y la Agencia EFE, el coche quedó con dos de sus ruedas traseras colgando a una altura aproximada de quince metros. El edificio donde ocurrió el accidente alberga diversas oficinas y cuenta con seis pisos, además de amplios ventanales protegidos por persianas de lamas. El vehículo rompió una de estas persianas y parcialmente el muro del aparcamiento.
La Policía Local de Ibiza intervino rápidamente, cortando uno de los carriles de la avenida Ignasi Wallis para asegurar la zona y proceder a la retirada del vehículo. Si se hubiera caído por completo, se habría desplomado en un pasaje muy transitado que conecta la avenida principal con el aparcamiento trasero de la antigua sede de los juzgados. Finalmente, no ha habido heridos.
Sin embargo, la mujer sufrió un severo ataque de ansiedad y tuvo que ser atendida por los servicios de emergencia en el lugar del accidente. Posteriormente, fue trasladada al centro de salud de Vila para permanecer en observación, situación que fue confirmada por el SAMU 061. “Ha sido alertado del incidente a las 9.50 horas y ha enviado una ambulancia de soporte vital básico”, informaron desde el servicio de emergencia. También sufría dolor cervical como consecuencia del choque del vehículo contra el muro.
“Parece una película de acción”
Muchos testigos en la zona, conmocionados por la escena, compartieron su asombro ante cómo se desarrollaron los acontecimientos. “Una situación que parece sacada de una película de acción”, comentó uno de los presentes al ver el vehículo suspendido. La rápida respuesta de los servicios de emergencia fue crucial para asegurar el perímetro y evitar mayores daños o posibles heridos.
En cuanto a las labores de retirada del vehículo, las autoridades locales desplegaron un operativo con grúas para poder descender el coche de manera segura. Este procedimiento, supervisado por expertos, garantizó que no se produjeran mayores inconvenientes durante la tentativa de llevar el coche a un lugar seguro.
La conductora, cuyo nombre no se ha dado a conocer, continuará bajo observación médica para asegurarse de que no haya complicaciones derivadas del episodio de ansiedad ni de posibles lesiones físicas que pudieran haber pasado desapercibidas inicialmente.
