Seguramente alguna vez hayamos intentado entrar con comida propia al interior de un aeropuerto. Los elevados costes de la comida en estas zonas extraterritoriales, así como en los propios vuelos, provoca que mucha gente intente acceder con algo de comida y picoteo para las horas de espera y de vuelo. Sin embargo, en el caso de que vayamos a hacerlo, tenemos que tener en cuenta una serie de pautas que nos da AENA, la empresa que gestiona los aeropuertos dentro de España.
Alimentos permitidos, pero con ciertas condiciones
Así como confirma AENA, se pueden introducir alimentos como equipaje de mano del avión, sin embargo, hay que tener en cuenta una serie de factores. En primer lugar, deben ser pequeñas cantidades para consumo personal, de forma que no excedan el límite de tamaño establecido por cada una de las compañías aéreas. Además, pueden ir en el interior de bolsos personales. Por otro lado, el personal de seguridad siempre tiene la posibilidad de la apertura de los envases que contienen los alimentos, siempre que lo requieran.
Asimismo, no todos los alimentos son permitidos, sino que hay ciertos de ellos que tienen una serie de restricciones. Cabe destacar la diferencia con el equipaje prohibido, ya que en el caso de los restringidos se pueden entrar con limitaciones, mientras que los prohibidos no se pueden introducir bajo ningún concepto.
Entre los alimentos que están restringidos se encuentran los productos animales, carne y lácteos. Esto es debido a que “los productos de origen animal pueden contener patógenos causantes de enfermedades infecciosas de los animales”, como nos advierten desde la Comisión Europea. En este caso, se deben presentar estos alimentos a procedimientos y controles veterinarios estrictos.
Lo mismo sucede con los vegetales, al igual que todas sus variantes como frutas, hortalizas, flores… Además, en esta ocasión, este tipo de comestibles deberán acompañarse de un Certificado Fitosanitario Oficial emitido por las autoridades competentes del país de origen. Tan solo quedan exentos de este certificado los plátanos, los cocos, los dátiles, las piñas y los duriones.
¿Y qué sucede con los líquidos?
En el caso de los líquidos y las bebidas, se permite su entrada en su totalidad. Dentro de los líquidos permitidos encontramos perfumas, cremas, aerosoles, geles, pasta de dientes, cosmética, colonias… No obstante, al igual que sucede en los alimentos, se deben cumplir unas condiciones para su entrada.
En primer lugar, tienen que estar en unos envases de capacidad no superior a 100 ml. que, a su vez, deben estar contenidos en una bolsa de plástico transparente. Asimismo, aquellos líquidos adquiridos en el duty free, deben estar también dentro de la bolsa de seguridad que te proporcionan en la tienda, junto al recibo de la compra.
En cuanto al alcohol, se permite la entrada de licores, vino y cerveza. En estos casos, también existen cantidades máximas, siendo, todos dentro de la Unión Europea, de 10 litros para licores, de 90 litros para vinos y 110 litros para cervezas. Sin embargo, estas cantidades máximas son permitidas si el alcohol ha sido comprado en el propio aeropuerto.