Por el terremoto de Popayán se creó norma de sismorresistencia
El devastador sismo que ocurrió a las 8:12 de la mañana del 31 de marzo de 1983, en la capital del Cauca, conllevó a que en la legislación colombiana se adoptara la primera norma de sismorresistencia para las construcciones en el territorio nacional, según explicaron en un artículo del SGC con motivo de la conmemoración de esta tragedia natural en la que perdieron la vida 250 personas.
La destrucción del movimiento telúrico, con una magnitud de 5,6 grados con una profundidad superficial de 15 kilómetros, tuvo como consecuencia que el 90 % del centro histórico ciudad fuera arrasado, mientras que en todo el departamento 5.000 edificaciones quedaran en ruina, agregaron desde la entidad.
El Servicio Geológico Colombiano consultó Fernando Díaz, ingeniero y experto en Amenaza y Riesgo Sísmico de esa entidad, quien recordó que en la década de 1980 se estaban recopilando normativas para que las edificaciones en el país pudieran soportar los sismos que son constantes en el territorio, sin embargo, la tragedia en Popayán aceleraron ese proceso.
“Para inicios de los años 80, la Asociación de Ingeniería Sísmica (AIS), conformada por profesores de varias universidades del país y expertos capacitados en el exterior, habían adelantado la adaptación de normas internacionales”, puntualizó.
Agregó que luego de ese terremoto, el Gobierno del entonces presidente Belisario Betancur expidió un decreto de emergencia para adoptar de manera exprés los criterios de construcción sismorresistente de la AIS, para que en 1984 se expidiera el Código Colombiano de Construcciones Sismo Resistentes.
“Esta norma se ha ido actualizando y hoy la conocemos como NSR-10. Por eso, en este aniversario, recordamos la importancia del cumplimiento de esta normativa, ya que es apremiante en el diseño y construcción de todas las edificaciones, pues vivimos en un país sísmicamente activo (sic)”, destacaron en otra publicación en su cuenta oficial en la red social X.