El próximo 6 de septiembre se estrenará en la Buenos Aires el documental Traslados, una obra que explora uno de los métodos de exterminio más oscuros de la última dictadura argentina: los vuelos de la muerte. Se exhibirá durante dos semanas en el Cine Arte Cacodelphia, ubicado en Avenida Presidente Roque Sáenz Peña 1150, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Dirigido por Nicolás Gil Lavedra y basado en una idea original de Zoe Hochbaum, es el primer documental que se atreve a reunir meticulosamente las evidencias de esta brutal práctica. La producción general estuvo a cargo de la actriz y Milagros Hadad para Orca Films. Según detallaron los productores, “la obra está diseñada para impactar especialmente en los jóvenes y las nuevas generaciones que no vivieron la última dictadura argentina”.
El documental incluye testimonios de ex detenidos, familiares, periodistas y especialistas, así como la participación de figuras notorias como el juez federal Daniel Rafecas y Estela de Carlotto. Uno de los testimonios más destacados es el del piloto y director Enrique Piñeyro, quien habla sobre el retorno en 2023 del SKYVAN PA51, uno de los aviones utilizados en estos vuelos, según lo informado.
Traslados abarca momentos clave, como el hallazgo de los cuerpos de las monjas francesas Léonnie Duquet y Alice Domon, y la infiltración del militar Alfredo Astiz en la organización Madres de Plaza de Mayo. Además, incluye un estremecedor testimonio del Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.
Para enriquecer la narrativa, el filme utiliza un extenso archivo de imágenes y animaciones nunca antes vistas. Este enfoque visual pretende no solo contar una historia sino preservar y mantener viva la memoria de los hechos ocurridos durante aquellos años.
Después de su estreno en la Argentina, Traslados formará parte de una gira mundial por prestigiosos festivales de cine internacionales. La película ya fue proyectada en el Marché du Film de la última edición del Festival de Cannes y, según los productores, será estrenada en una plataforma de streaming tras su recorrido por los festivales.
La presentación en Francia se dio en el marco del programa “Cine Argentino Presente” y estuvo a cargo de Zoe Hochbaum, a quien acompañaron Hernán Findling y Sabrina Farji, presidente y vice de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina. Asistieron a la proyección Bernardo Bergeret, gestor cultural y artístico, y principal promotor de la cinematografía argentina a nivel internacional; Fernando Juan Lima, director del Festival Mar del Plata; Luis Alberto Scalella, presidente de Argentina Sono Film y presidente del Comité de Festivales de la Federación Internacional de Asociaciones de Productores Cinematográficos (FIAPF), además productores de la industria cinematográfica.
Los vuelos de la muerte
Se trató de una de las metodologías más brutales que se realizaron en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), debido a la necesidad de ocultar los delitos perpetrados. Este lugar, hoy llamado Espacio de la Memoria y Derechos Humanos, fue durante ese período uno de los centros clandestinos de detención más importantes, ya que mientras torturaban personas, a pocos metros, las altas jerarquías de la Armada disfrutaban de un lugar para el esparcimiento y descanso.
Los aviones partían también del Aeródromo Militar Campo de Mayo. Sin embargo, la estrategia era similar en todos los centros en los que se llevaba a cabo esta práctica sistemática, con el único objetivo de eliminar las pruebas materiales de los delitos de lesa humanidad cometidos y borrar las marcas del terrorismo de Estado.
De acuerdo con los datos que se pudieron recolectar, se sabe que las personas secuestradas eran trasladadas desde sus lugares de reclusión y que se les aplicaba un tranquilizante que los adormecía. En ese estado, eran llevados durante la madrugada hasta Aeroparque o a otras bases militares y subidos a diferentes aeronaves, desde donde los arrojaban al Río de La Plata o al mar. Algunas personas fueron asesinadas antes de subir y otras fueron lanzadas aún con vida al agua.
Las corrientes hicieron que algunos de los cuerpos de las víctimas aparecieran en las costas argentinas y uruguayas y el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) pudo identificarlos varios años después. Entre ellos, se encuentran los cadáveres de las tres mujeres fundadoras de Madres de Plaza de Mayo: Azucena Villaflor, Esther Ballestrino de Careaga y María Eugenia Ponce de Bianco, cuyos cuerpos aparecieron en las costas de la Provincia de Buenos Aires en 1977, pero recién en el año 2005 pudieron ser identificadas.