La contaminación del aire a nivel mundial está provocando un aumento en las tasas de cáncer de pulmón, incluso entre aquellos que nunca han fumado. Según un estudio en Estados Unidos con 12.000 pacientes, la proporción de no fumadores diagnosticados con cáncer de pulmón aumentó del 8% al 15% en veinte años. En Taiwán, según otro estudio, dos tercios de los nuevos casos de cáncer de pulmón se dan en personas que nunca han fumado. A raíz de estas cifras, este fenómeno está siendo observado a nivel global.
La relación entre la contaminación del aire y el cáncer de pulmón
La contaminación del aire es una de las razones clave detrás del cáncer de pulmón en no fumadores. Las partículas PM 2,5, que son unas treinta veces más pequeñas que un cabello humano, pueden ser inhaladas profundamente por los pulmones, afectando el ADN de las células y aumentando el riesgo de cáncer. Según la Asociación Internacional para el Estudio del Cáncer de Pulmón, más de 300 mil personas mueren cada año.
Un estudio publicado en la revista Nature mostró que las partículas PM 2,5 incitan una oleada de células inmunes en los pulmones y la inflamación resultante “despierta” la mutación del EGFR , lo que desencadena un crecimiento celular incontrolable. En Taiwán, el aire contiene cuatro veces la cantidad de PM 2,5 considerada segura por la Organización Mundial de la Salud (OMS), contribuyendo al aumento de los casos entre no fumadores.
El cáncer de pulmón en personas que nunca han fumado
El adenocarcinoma es el tipo de cáncer de pulmón más común entre los no fumadores. Este tipo de cáncer tiende a ser un poco más difuso en lugar de un punto bien definido. Aproximadamente en la mitad de los casos de cáncer de pulmón en no fumadores, la enfermedad puede tratarse con medicamentos de precisión. Según Mong-Wei Lin de la Universidad Nacional de Taiwán (NTU), esto facilita atacar las mutaciones específicas y bloquear el crecimiento de tumores de forma más efectiva que con quimioterapia.
Una de las principales lecciones que Taiwán puede ofrecer es la implementación de programas de detección de sólidos para el cáncer de pulmón. Debido a la percepción errónea de que el cáncer de pulmón solo afecta a los fumadores, muchos no son conscientes de su enfermedad hasta que está en etapas avanzadas. En 2015, Pan-Chyr Yang lanzó el ensayo Taiwan Lung Cancer Screening in Never-Smoker (TALENT), dirigido a personas con factores de riesgo como antecedentes familiares o exposición a contaminación por cocción sin ventilación, independientemente del historial de tabaquismo.
Después de evaluar a más de 12 mil participantes, TALENT encontró cáncer de pulmón en 2,1 de cada 100 pacientes no fumadores examinados, comparado con el 1,1% del Ensayo Nacional de Detección de Cáncer de Pulmón de Estados Unidos, que solo examinó a personas con historial de tabaquismo intenso.
Resultados prometedores en la detección temprana
La detección temprana es crucial para mejorar las tasas de supervivencia. En el Hospital NTU, los diagnósticos de cáncer de pulmón en etapas III y IV se redujeron del 71% al 34% entre 2006 y 2011, y 2015 a 2020, mientras que los diagnósticos tempranos aumentaron. Esto se tradujo en un aumento de la tasa de supervivencia a cinco años del 22% al 55%.
Con estos resultados, Taiwán lanzó un programa nacional de detección en julio de 2022, estableciendo una vía para quienes tienen antecedentes de tabaquismo intenso y otra para no fumadores con antecedentes familiares de cáncer de pulmón.
A diferencia de Estados Unidos, donde solo el 4,5% de las personas elegibles se someten a pruebas de detección de cáncer de pulmón, Taiwán ha logrado una aceptación del 15% en dos años.
A medida que las tasas de tabaquismo disminuyen y la contaminación del aire aumenta, es vital adaptar los programas de detección y aumentar la elegibilidad para incluir a los no fumadores en riesgo. Los esfuerzos de Taiwán brindan un modelo de efectivo que otros países pueden seguir para reducir la mortalidad por cáncer de pulmón.