El patrón del yate Dennis Viehof, que arroyó el pasado viernes a un joven en Cala Bona, en Son Severa (Mallorca), ha sido imputado por homicidio imprudente y omisión de socorro. La acusación se realizó tras su comparecencia voluntaria este miércoles en la Comandancia de la Guardia Civil, donde el hombre se acogió a su derecho a no declarar y fue informado de los delitos que se le imputan.
Viehof quedó en libertad tras la comparecencia y en los últimos días, la Policía Judicial de la Guardia Civil ha intensificado la investigación del caso, centrando sus esfuerzos en el análisis de pruebas y en la toma de declaraciones a testigos del trágico suceso.
Accidente en Cala Bona
El incidente ocurrió el pasado viernes alrededor de las 22:00 horas, cuando el joven, Guillem Comamala, de 21 años, se encontraba pescando con dos acompañantes, su hermano de trece años y su tío. En un abrir y cerrar de ojos, el yate La Luna, capitaneado por Dennis Viehof, de 35 años de edad, colisionó brutalmente con la pequeña embarcación, golpeando a Guillem de forma muy violenta, lo que provocó su muerte instantánea.
Los amigos, aunque no sufrieron heridas físicas, sí necesitaron atención psicológica. Según los supervivientes, el impacto fue tan fuerte que arrancó el motor del bote, dejando la embarcación completamente inoperante. Tras el accidente, el yate prosiguió su camino hacia su puerto base en Porto Cristo. El yate “La Luna”, valorado en cuatro millones de euros, representa uno de los mayores lujos del sector náutico.
El sábado por la mañana, una mujer fue vista limpiando en el lujoso barco de Viehof, antes de que la Guardia Civil pudiese precintarlo. Según los testigos, se intentaba eliminar toda prueba de la fiesta que la tripulación había celebrado la noche anterior. Se comunicó que la tripulación arrojó vasos hacia el muelle mientras limpiaban apresuradamente la embarcación.
La Guardia Civil, tras varias horas de búsqueda pudo localizar el yate en Porto Cristo, para después interrogar a su tripulación, que negó haber notado el impacto con el bote de Guillem. Las cámaras de seguridad del club náutico serán cruciales para determinar cuántas personas estaban a bordo del yate de Dennis Viehof.
Las autoridades también están indagando si el patrón de barco intentó huir de Mallorca cogiendo un vuelo de última hora. Según los vecinos del puerto, el patrón es un piloto de avión que había organizado varias fiestas en el pasado con jóvenes y alcohol.
Minuto de silencio
Decenas de mensajes han ido apareciendo en redes sociales en cuanto se dio a conocer la identidad del joven arroyado el pasado viernes 23 de agosto.
Su club de voleibol, deporte del que Guillem era gran aficionado, ha expresado su pésame de una forma increíble: “Nos enamoró a todos con su personalidad y su calidad como jugador, vivimos con él momentos espectaculares y levantamos copas, nos colgamos medallas pero también superamos derrotas. Crecimos y juntos nos sentimos orgullosos de compartir momentos inolvidables”, expresan en la publicación.
El Ayuntamiento de Son Servera lamentó la muerte de Guillem y durante el acto de despedida el miércoles 24 en Cala Bona se hizo un minuto de silencio. Además, el club Manacor, de la Superliga Masculina de Voleibol española, también se sumó al pésame de las familia y amigos vía redes sociales.