Un grupo de empleados del estudio francés Spiders, desarrolladores de GreedFall II: The Dying World, ha hecho pública una carta abierta denunciando las precarias condiciones laborales a las que están sometidos. Según los trabajadores, la dirección de la compañía, encabezada por Anne Devouassoux, estaría tratando a su equipo como “esclavos de galera”, refiriéndose al antiguo tipo de barco, debido a las jornadas agotadoras y una presión constante para cumplir con plazos irrealistas.
Entre las principales quejas de los trabajadores se encuentran la inestabilidad laboral, la falta de transparencia en la gestión del proyecto y la ausencia de medidas para garantizar la igualdad de género. Además, denuncian que el presupuesto de GreedFall II: The Dying World ha sido modificado en numerosas ocasiones y que el lanzamiento del juego se ha retrasado repetidamente, lo que ha generado ansiedad y desmoralización entre el equipo.
Los empleados llevarán a cabo una huelga durante la semana del 2 de septiembre, en una clara señal de que la situación en el estudio desarrollador Spiders es insostenible. Los trabajadores exigen mejoras en sus condiciones laborales y una mayor transparencia por parte de la dirección. Esta situación pone en riesgo el lanzamiento de GreedFall II: The Dying World, el cual tiene planes de un acceso anticipado para el 24 de septiembre y una salida oficial para el año siguiente.
La huelga en Spiders se suma a un creciente movimiento de empleados en el sector que buscan protegerse de los despidos masivos y las amenazas planteadas por la inteligencia artificial. En un contexto marcado por la creciente influencia de los sindicatos del sector, como lo demuestra la reciente unión de los trabajadores de Bethesda Game Studios, la huelga en Spiders podría convertirse en un otro evento importante para la industria de los videojuegos.
