Entre el anuncio de una medida del gobierno y su puesta en marcha, el tiempo que transcurre depende de muchos factores que van desde la propia política y sus vericuetos, hasta la reglamentación misma, pasando por el filtro siempre necesario de crear el ámbito de aplicación.
El 26 de abril de este año, el ministro de Economía, Luis Caputo, había expuesto en su perfil de la red social X (exTwitter), una serie de medidas que el gobierno implementaría para mejorar la competitividad de la industria automotriz argentina, especialmente en función de mejorar su perfil exportador, que es el que permite expansión e ingreso de divisas a la economía del país.
“Con el objeto de mejorar la competitividad e impulsar el crecimiento del sector automotriz, lanzaremos una rebaja de aranceles e impuestos que beneficiará a este sector que actualmente tiene el 10% de la producción total industrial y genera más de 75.000 empleos”, decía la introducción de su posteo.
Entre esas decisiones del Palacio de Hacienda, estaban las de renovar la exención de derechos de exportación para las ventas al exterior incrementales que estaba vigente desde 2021 y que habían vencido en diciembre de 2023 sin haberse renovado y una mejora del sistema conocido como Repostock (reposición de existencias) a través de una sistematización y digitalización del proceso, que ya existe pero prácticamente era inutilizable por la falta de una herramienta tecnológica adecuada para hacerlo efectivo.
Este jueves, el Ministerio de Economía emitió un comunicado detallando dos medidas que tienen directa relación con aquellas que se anunciaron oportunamente y que causarán un impacto directo en la industria automotriz, como son la baja de trámites para la importación de acero y la sistematización de Repostock.
Acero y Repostock
En el caso del acero, hay dos tipos de material que se utiliza en la fabricación de autos: los aceros planos, que se usan para estampados, y los aceros redondos o en barra que se destinan a forja, tornillería, etc. En ambos casos, la industria tiene un mix de aceros nacionales e importados, por lo cual, el cambio en la reglamentación técnica que debía cumplir con determinados pasos para la importación, permitirá reducir notablemente los tiempos de ejecución de importaciones que, en el caso de la chapa con la que se estampan las partes de carrocería, muchas veces eran diarias, exactamente iguales a las del día anterior, y sin embargo debían cumplir con un proceso burocrático manual, que consumía recursos y tiempo.
La otra medida está relacionada con el costo de las importaciones de partes que saldrán como componentes de un vehículo que se exportará desde la Argentina, proceso que se denomina como Repostock. La medida anunciada por el gobierno tendrá un impacto indirecto pero real, ya que no se trata de una reducción arancelaria sino de una simplificación de algo que ya existía, pero que por su compleja implementación, era muy difícil de llevar a la práctica, “al punto tal que se hacía en papel y era tan complicado que solo 73 empresas lo usaron en 2023, teniendo en cuenta que hay un universo de más de cinco mil empresas exportadoras que podrían usarlo”, dice el Palacio de Hacienda.
Para explicarlo en términos más simples, la fabricación de un automóvil en Argentina tiene un porcentaje de componentes nacionales cercano al 30%, mientras que el 70% restante son importadas. Pero para fabricar ese 30% de partes locales, se importan también insumos, por lo tanto, aún los componentes argentinos tienen una proporción de materia prima o partes que vienen del exterior.
El concepto del Repostock es permitir una reposición de esos insumos o componentes que fueron equipando un vehículo o autoparte exportada sin pagar derechos de importación. Pero que, por el sistema manual y sumamente burocrático a través del cual se implementaba, generaba que muchos proveedores de la industria desistieran de usarlo.
“Además, ese trámite tenía un vencimiento, un plazo de tiempo determinado para poder usarse en nuevas importaciones, y como el proceso era casi imposible de implementar, muchas empresas desistían y asumían ese impuesto de importación como parte de sus costos. El tema es que esos costos nos los trasladaban a nosotros para todos los autos que fabricamos, por lo que los encarecía, haciendo que pierdan competitividad en el mercado externo”, explicó una fuente de una terminal automotriz a Infobae.
La sistematización permitirá que se pueda llevar detalladamente un control real de insumos o componentes importados que conforman un producto elaborado en Argentina para el mercado de exportación, y que de ese modo puedan quedar exentos pagar el impuesto de importación de extra zona (lo que viene de Brasil no lo paga porque tiene arancel 0%), que promediando entre las distintas alícuotas que tienen según el material y la procedencia, promedia cerca de un 14% que ya no se pagará.
Repercusiones
“Las medidas anunciadas por el Ministerio de Economía, referidas a la importación de aceros y la sistematización y digitalización del régimen de Reposición de Existencias (Repostock); resultan positivas y van en el camino correcto para mejorar la competitividad y capacidad de inserción internacional del sector”, dice la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) en un comunicado publicado en las primeras horas de esta tarde.
Además, señalan que “La eliminación del trámite de excepción para importar aceros es un paso más en la desburocratización y simplificación de procedimientos que redundan en una reducción de tiempos y recursos”, mientras que la digitalización del Repostock es tomada como “un avance sustancial en los tiempos del proceso administrativo y permitirá que muchas más autopartistas y terminales utilicen el sistema por la reducción de los plazos de los trámites y la optimización de los recursos que finalmente contribuyen a la mejora de costos y a la tan necesaria competitividad exportadora del sector automotor”.
Martín Zuppi, presidente de Adefa dijo que “estas medidas son muy positivas y sin dudas forman parte de los resultados de una sostenida labor conjunta entre el sector privado y el Gobierno para el desarrollo y fortalecimiento de nuestra industria”.
Del lado de los autopartistas, también fue recibida como una buena noticia que va en el sentido que la industria necesita. Juan Cantarella, presidente de la Asociación de Fábricas de Componentes (AFAC), dijo que “En el caso de Repostock es una medida muy positiva que mejora la competitividad de la cadena exportadora automotriz -autopartista. Es un gran primer paso hacia esquemas que faciliten exportar con una menor carga impositiva. Esto sumado al anuncio de reducción de aranceles para moldes y matrices facilitará los procesos de localización de autopartes, brindando mayor equidad y lógica arancelaria en la cadena productiva”.
Medidas pendientes
Así como se pudieron confirmar estas dos decisiones, todavía quedan otras dos medidas que mantienen con expectativa a la industria automotriz y autopartista. Una es la que mencionó Cantarella, y que tiene que ver con la reducción de aranceles para la importación moldes y matrices, y que resultan fundamentales para promover la relocalización de productos de industria argentina que hoy se traen desde otros mercados, especialmente el brasileño.
Lo que anunció Caputo en abril fue una reducción de los aranceles de moldes de metal (matrices) usados por la industria automotriz del 35% al 12,6%, y de los moldes de inyección plástica, que bajarán del 24% al 12,6%. Si bien ya se conocían estas nuevas alícuotas, ni entonces ni ahora hay conocimiento de la fecha de implementación, aunque en el sector confían que será en muy poco tiempo.
El otro gran punto a resolver es el de la aplicación del impuesto PAIS a las importaciones que entran en el Repostock, que hoy todavía es del 17,5% y será del 7,5% desde el próximo lunes, pero que al ser un impuesto nacional, lo que hace es generar la famosa “exportación de impuestos” que la industria sigue reclamando como una necesidad para mejorar la competitividad de los productos argentinos.
Si bien se espera que lo eliminen completamente para este ítem antes de fin de año, el peor escenario sería el de los próximos cuatro meses, ya que indefectiblemente con la finalización de diciembre, el impuesto PAIS desaparecerá para todo tipo de importaciones.