El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha anunciado que este martes llevará a la reunión Consell Executiu una propuesta para volver a convocar la comisión técnica entre el Govern y el Gobierno central sobre la ampliación del Aeropuerto de Barcelona – El Prat.
Lo ha dicho este lunes por la noche en una entrevista de 3Cat recogida por Europa Press, en la que ha explicado que es necesario reactivar esta mesa para ver “cómo se puede mejorar” esta infraestructura con criterios de máximo rigor ambiental.
UNA CUESTIÓN “DORMIDA”
Illa ha afirmado que serán los técnicos los que deberán exponer cuáles son las mejores propuestas para que esta infraestructura pueda recibir aviones de mayor envergadura: “No podemos tener esta cuestión dormida o apartada”.
El presidente ha previsto que los trabajos técnicos se pueden alargar entre tres y cuatro meses, e insiste en que volver a reunir la mesa técnica “es el primer paso” para aumentar la capacidad de la infraestructura.
RIGOR MEDIOAMBIENTAL
“Hay una serie de propuestas que se han hecho desde la sociedad civil. Es necesario que se estudien de forma técnica. Se hará con el máximo rigor medioambiental”, ha insistido.
Ha hecho hincapié en que no ve contrapuestas la preservación del medio ambiente y la actividad económica: “Creo que hay maneras de encontrar un punto de equilibrio”.
Al preguntársele por si es partidario de alargar la tercera pista hacia el norte o de proteger otras zonas naturales del entorno del Delta del Llobregat, Illa ha declinado anticiparse y ha subrayado que la decisión que se tome deberá cumplir la legislación medioambiental vigente, y no ha descartado medidas compensatorias.
HARD ROCK
En relación al proyecto del Hard Rock, que ha definido como “un proyecto interesante para el Camp de Tarragona”, ha garantizado que, de implementarse, no tendrá beneficios fiscales.
Illa ha explicado que la decisión de revertir los beneficios fiscales se enmarca en el acuerdo de investidura con los Comuns: “La política es esto, llegar a acuerdos en sociedades plurales”.
“Si hubiera tenido 68 diputados lo hubiera hecho distinto. Ellos también han hecho renuncias. Creo que son buenos acuerdos para el futuro de Catalunya”, ha añadido.
También ha dicho que prevé reunirse en las próximas semanas con los impulsores del Hard Rock y que, si el proyecto no prospera, el Govern buscará otras propuestas que “puedan ser interesantes” para el Camp de Tarragona.