En redes sociales se desencadenó hace unos meses una confusión luego de que aparecieran notificaciones y hashtags que anunciaban “Sismo magnitud 9.5″ pues muchas personas desconocían el nombre de la película que estaba por llegar a las salas de cine mexicanas.
En cuanto la población supo que se trataba de una producción cinematográfica filmada en 2023, los memes comenzaron a circular en redes sociales.
De acuerdo con la trama, este sismo detonó el caos en una próspera ciudad de Asia. Mientras las instancias responsables de salvaguardar a la población discuten el plan de emergencia ante el temor de explosiones en cadena en instalaciones que almacenan combustibles, una de las científicas pone como antecedente una de las tragedias más grandes que años atrás había sucedido en México.
La tragedia mexicana mencionada en Sismo magnitud 9.5
Al mencionar las cinco explosiones más grandes del mundo, la científica recuerda la de San Juanico, en el estado de México en la década de los ochenta.
Corría la madrugada del 19 de noviembre de 1984 y de pronto el fuego se levantó a casi 2 mil metros de altura. Una explosión despertó a muchas familias debido a una fuga en las instalaciones de gas ubicadas en San Juan Ixhuatepec, Estado de México.
Cinco minutos después se escuchó otra detonación y 10 minutos más tarde una explosión aún más fuerte, durante los próximos 50 minutos se registraron más de 10 estallidos en toda el área de acuerdo con un reportaje de TV Azteca.
La cadena de explosiones fue de tipo BLEVE, un acrónimo en inglés que significa explosión de vapores que se expanden al hervir el líquido, en una planta de almacenamiento y distribución de Petróleos Mexicanos (PEMEX).
Las más fuertes comenzaron a las 5:45 hrs. y terminaron a las 7:01:27 hrs. Incluso se registraron explosiones menores hasta el día siguiente por la mañana.
De acuerdo con la entonces Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, 40 cilindros de gas, unos enteros y otros deshechos, impactaron contra algunas casas en un radio de aproximadamente un kilómetro.
Ambulancias arribaron al lugar para atender a 926 heridos por quemaduras y recoger cuerpos de diferentes edades; el saldo de fallecimientos fue tal que desfilaron 503 ataúdes aquel día.
Además fue necesaria la evacuación de más de 50 mil personas, pues existía el riesgo de presenciar otra detonación y 7 mil personas fueron atendidas en hospitales .
Las explosiones fueron calificadas como las más mortíferas registradas en la historia causadas por el gas licuado de petróleo y uno de los peores accidentes industriales.
¿Qué provocó las explosiones?
Al ser una planta que debía surtir gas a la Ciudad de México y sus alrededores, contaba con tanques de almacenamiento grandes con la finalidad de que tuviera una reserva estratégica para la región y que garantizara el suministro.
Al estar ubicada en una zona densamente poblada se equipó con una red de tuberías y sistemas de distribución que supuestamente cumplían algunos de los protocolos de seguridad más estrictos del mundo. Sin embargo, fuentes periodísticas señalan que habitantes de la zona ya habían comentado previamente a las autoridades un fuerte olor a gas pero hicieron caso omiso, lo que concluyó en un grave desastre.
La magnitud de las detonaciones fue tan grande que el sismógrafo de la UNAM ubicado a 30 km las detectó. La radiación térmica fue tan fuerte y rápida que impidió a muchas personas huir.
Algunos recuerdan la imagen de salchichas, refiriéndose a los tanques de gas, volando, el olor de la piel quemada y personas huyendo con las pertenencias que podían cargar según testimonios proporcionados al diario El Universal.