La Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (Alta) expresó su profunda preocupación por el posible incremento del impuesto al carbono en Colombia, una medida que se propone en la nueva reforma tributaria o ley de financiamiento que propone el Gobierno de Gustavo Petro y con la que se recaudarían $12 billones para financiar el monto del Presupuesto General de la Nación (PGN) de 2025, que sería de $523 billones.
Exactamente, la propuesta para el sector extractivo es que se aumenta la tarifa del impuesto al carbono, de $25.000 por tonelada a $75.000 y se modificará la destinación. También, los recursos del Fondo para la Vida y la Biodiversidad y para el Fondo Colombia en Paz se mantienen en términos del monto que reciben en la actualidad.
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Al respecto, el director ejecutivo y CEO de Alta, José Ricardo Botelho, indicó que el aumento del impuesto al carbono afectaría de manera directa el precio del combustible de aviación, que representa más del 35% de los costos operativos de las aerolíneas en Colombia. Esto, según el directivo, inevitablemente, incrementaría el precio de los tiquetes aéreos.
El escenario financiero actual no es favorable para la industria aérea en Colombia. La Alta destaca que en 2023 el margen neto de la industria fue solo de un 1,36%, muy por debajo del promedio del 7,5% de las 1.000 empresas más grandes del país, según datos de la Superintendencia de Sociedades.
Costos adicionales para aerolíneas y pasajeros
Tal como mencionó Botelho, “este escenario financiero hace imposible que las aerolíneas asuman los costos adicionales sin que esto impacte a los pasajeros”.
Además del impacto directo en los precios de los tiquetes, la medida propuesta tendría un efecto dominó en varios aspectos económicos y sociales. Según el informe de la entidad, un aumento en los costos del transporte de carga encarecerá los productos para los colombianos y afectará la competitividad de las empresas que dependen del comercio internacional.
En este sentido, manifestó que “el impacto social es que el aumento en los costos afectaría la demanda de transporte aéreo de pasajeros y de otro lado, encarecerá el transporte de carga, impactando la competitividad de las empresas que dependen del comercio internacional y el precio final que pagan los colombianos por los productos”.
Aporte al crecimiento del PIB
La importancia de la industria aérea en la economía colombiana es innegable. Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) citadas por Alta, en 2023, la contribución del transporte aéreo al Producto Interno Bruto (PIB) fue del 0,71%, lo que supone un aumento importante desde el 0,4 % de 2005.
Este sector mostró un crecimiento sostenido, con una tasa promedio anual del 6,8% de 2005 a 2022, lo que superó el crecimiento promedio de la economía colombiana, que fue del 3,8%. Botelho añade que “además, el transporte aéreo tiene un efecto multiplicador: por cada unidad de producción añadida, se genera casi USD2 adicionales en la economía”.
Impacto en el turismo
El turismo también se verá afectado por el aumento del impuesto. Migración Colombia indica que el 76% de los más de cuatro millones de turistas internacionales que visitan Colombia lo hacen por vía aérea, lo que genera un gasto significativo de USD4.269 millones para la economía colombiana. Tal como señala el informe de Alta: “De igual manera, las exportaciones del país se verían afectadas pues aunque ciertamente solo el 0,3% de las exportaciones por peso se hacen por vía aérea, estas representan más del 14% del valor total de las exportaciones”.
En el ámbito laboral, la medida también tendría repercusiones. La industria del transporte aéreo sostiene más de 600.000 empleos directos en Colombia y contribuye al 2,7 % del PIB, lo que subraya su papel crucial en la economía nacional. Se resalta que “el transporte aéreo ha mostrado un crecimiento sostenido en las últimas dos décadas, aumentando su participación en la economía del país”.
Por todo lo anterior, la Alta hizo un llamado al Gobierno Petro y los congresistas colombianos a reconsiderar el aumento del impuesto al carbono y adoptar medidas que no perjudiquen a una industria que es vital para el desarrollo económico y social del país.