La elección del nuevo Procurador ha generado una ola de críticas dirigidas al presidente Gustavo Petro por su decisión de seleccionar al secretario del Senado, Gregorio Eljach.
Este nombramiento generó un intenso debate entre juristas y otros candidatos, quienes consideran que la elección favorece intereses políticos en lugar de competencia académica.
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Al respecto, el abogado, docente y candidato al cargo de procurador David Suárez Tamayo expresó su frustración en una entrevista con Blu Radio, sobre cómo, a pesar de haber cumplido con todo el proceso, varios candidatos vieron que un tercero fue el seleccionado.
Para Suárez Tamayo, esta era una oportunidad histórica que se desperdició para elegir a “personas que no estuvieran vinculadas a una casa política, que no tuvieran un jefe político” y que así fuera seleccionado a un verdadero jurista para convertir la Procuraduría en un organismo “técnico, autónomo e independiente”, algo que el órgano de control fiscal “no ha podido ser durante estos 32 años de la Constitución”.
Suárez Tamayo manifestó que, aunque su aspiración era ingenua, creía que “se podía hacer el esfuerzo”, al igual que otros candidatos que quedaron frustrados.
“En la lista del Consejo de Estado había dos grandes juristas que eran muy superiores a Felipe Henao, como es el doctor Gustavo Quintero, profesor de Los Andes, ha ejercido la profesión durante 20 años ante el Consejo de Estado, ante la Procuraduría; también estaba la doctora Martha Lucía Zamora que estuvo de fiscal encargada y ha trabajado en la JEP”.
En cuanto a los preseleccionados por el Consejo de Estado, Tamayo aseguró que también había “dos grandes juristas que podían estar en la terna, Álvaro Namen, que fue consejero de Estado o la doctora Mónica Cifuentes, pero lamentablemente vimos como el Consejo de Estado y la Corte Suprema optaron por dos candidatos de una casa política con jefe político”.
En cuanto a la decisión del presidente Petro, Suárez Tamayo fue contundente: “Lo de Petro sí es mucho más lamentable porque, a pesar de haber hecho una convocatoria pública, la gente se inscribió, había 20 preseleccionados, ni siquiera los llamaron a entrevista, finalmente elige al doctor Gregorio Eljach que ni siquiera se había inscrito en la convocatoria, que no había estado en el proceso que había convocado el presidente”.
Para Tamayo, esta situación resultó especialmente desalentadora en un gobierno que “supuestamente, se convoca al cambio”, y que termina eligiendo “a una persona absolutamente política como el doctor Eljach”.
Además, hizo énfasis en la falta de transparencia en el proceso de elección, menospreciando el esfuerzo de los 20 preseleccionados que ni siquiera fueron llamados a entrevista.
Acuerdos políticos para la elección
En cuanto a la politización en la Procuraduría, el abogado aseguró que hay cerca de 150 cargos de libre nombramiento y remoción dentro de la entidad, con salarios que pueden superar los 45 millones de pesos, por tal motivo, agregó que se corre el riesgo “cuando en un organismo de esos está a la cabeza un político o una cuota política”.
También recordó la elección de Margarita Cabello y de Fernando Carrillo, los cuales, alcanzaron más de 80 votos en el Senado al momento de su elección, lo que para el profesor, es un reflejo de la politización en el Congreso.
“Eljach ya está prácticamente elegido y en los últimos años ha sucedido lo mismo, la doctora Margarita Cabello fue elegida en el Senado con 82 votos y Fernando Carrillo, anterior a Margarita, fue elegido con 93 votos, eso también preocupa, si un Congreso es un órgano deliberativo, político de diferentes tendencias y le presentan tres nombres, que un solo candidato tenga 80 votos o tenga 90 votos, ya eso muestra que eso hace parte de un acuerdo político”.
