El expresidente de la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF) de Bolivia pasó de testigo a imputado en medio de la investigación que lleva la Fiscalía contra el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset.
El Ministerio Público imputó a Noel Montaño por la presunta comisión de los delitos de tráfico de sustancias controladas, uso de armas, asociación delictuosa y confabulación. En este proceso se investiga al exdirigente por supuestamente habilitar a Sebastián Marset como jugador del Club Los Leones en la ACF, bajo una identidad falsa a cambio de dinero.
Según las investigaciones, el narcotraficante uruguayo llegó a Bolivia en septiembre de 2022 y jugaba al fútbol con documentación falsa. Figuraba como dueño del equipo e integraba el plantel de Los Leones El Torno, que jugaba el campeonato de la ACF. Según reportes de prensa, Marset usaba documentación de la Confederación Brasileña de Fútbol y jugaba con el nombre Luis Amorim.
El fiscal boliviano Julio César Porras, además de ampliar la imputación contra Montaño, también imputó al abogado Oscar Canedo, exasesor de la ACF, por delitos de tráfico de sustancias controladas, uso de armas, asociación delictuosa y confabulación, según reportan los medios locales. El Ministerio Público solicitó la anotación preventiva de los bienes de ambos imputados además de la detención preventiva de 180 días en la cárcel de Palmasola en Santa Cruz de la Sierra.
En una declaración anterior, Montaño negó cualquier relación con Marset y sus actividades ilícitas mientras estuvo en Bolivia. “Soy inocente de todo lo que se me acusa y voy a prestar mis declaraciones, cuando así lo requiera la Fiscalía (…) Mellaron mi dignidad, estoy muy dolido y no quiero saber más de futbol”, dijo Montaño a los medios al salir de una audiencia en el mes de julio.
Antecedentes del narcotraficante en Bolivia
Marset es uno de los narcotraficantes más buscados de la región por su implicación en actividades criminales en varios países de América Latina. Se lo relaciona con el asesinato de un fiscal paraguayo, Marcelo Pecci, quien fue abatido en Colombia en mayo del año 2022.
Según publicaciones de medios de prensa, Marset llegó a Bolivia en septiembre de 2022 junto a su familia utilizando una identidad falsa. A pesar de ser buscando por varios países, llevaba un estilo de vida lujoso y era dueño y jugador de un equipo de futbol de segunda división.
En noviembre de 2023, huyó del país junto a su esposa y sus hijos cuando la Policía Boliviana buscaba capturarlo en su vivienda en Santa Cruz de la Sierra. Más tarde, reveló en una entrevista con un medio uruguayo que fueron policías quienes “lo ayudaron” a salir del país. Desde entonces, se encuentra prófugo.
En los operativos para encontrarlo decomisaron 17 fusiles, una pistola, 1.915 municiones, 28 cargadores para diversos tipos de armas, cuatro chalecos antibalas, una motocicleta, 31 vehículos, cuatro cuadratrak, un terix. También se encontró marihuana, vehículos de alta gama y varios documentos.
Su esposa, Gianina García Troche, fue detenida el 17 de julio de este año en el aeropuerto Barajas de Madrid, España, y guarda detención en ese país, a la espera de que se proceda con la extradición que exige el Gobierno de Paraguay.