Al menos 40 palestinos han muerto y cerca de 60 han resultado heridos a causa de un bombardeo ejecutado por el Ejército israelí contra la “zona humanitaria” designada en el sur de la Franja de Gaza, según ha denunciado la Defensa Civil gazatí, en medio de afirmaciones de Israel sobre que el ataque ha tenido como objetivo a varios altos cargos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
La Defensa Civil de Gaza ha hablado de “una masacre” en Al Mauasi y ha subrayado que “hay familias enteras desaparecidas bajo la arena”. “Nuestros equipos no tienen el equipamiento necesario para hacer frente a la masacre”, ha lamentado, según ha recogido el diario palestino ‘Filastin’, vinculado a Hamás.
Asimismo, ha recalcado que el Ejército ha usado “misiles altamente explosivos” en el bombardeo, lo que ha causado una “destrucción masiva” en el lugar, lleno de tiendas de campaña usadas por los desplazados. “El ataque ha dejado tres agujeros de unos diez metros de profundidad en una zona con entre 20 y 40 tiendas de desplazados”, ha dicho.
La oficina de prensa de las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, ha denunciado igualmente la “horrible masacre cometida por el Ejército de ocupación, que ha bombardeado tiendas de campaña de desplazados”, al tiempo que ha señalado que hay decenas de personas desaparecidas, por lo que el balance de fallecidos podría aumentar en las próximas horas.
“Esta horrible masacre tiene lugar en un momento en el que la ocupación ha destruido el sistema sanitario y los hospitales, que están fuera de servicio”, ha dicho, antes de acusar a Israel de “intentar engañar en vano a la opinión pública difundiendo mentiras, afirmaciones falsas e historias inventadas”.
“Es un intento fallido de justificar la horrible masacre”, ha destacado, antes de incidir en que las autoridades israelíes “han practicado una política de engaño en repetidas ocasiones desde el inicio de su guerra genocida para intentar ocultar su fracaso y los crímenes cometidos contra civiles y desplazados, especialmente niños y mujeres”.
Por ello, ha hecho responsable a Israel y Estados Unidos de lo sucedido y ha pedido a la comunidad internacional que “presionen a la ocupación israelí y a la Administración estadounidense pra detener la guerra genocida y el derramamiento de sangre en la Franja de Gaza”.
LA VERSIÓN DE ISRAEL
Por su parte, el Ejército de Israel ha afirmado en un comunicado publicado en su página web que el objetivo han sido altos cargos de Hamás y ha afirmado que entre los muertos figuran Samer Ismail Jader abú Daqa, jefe de la ‘fuerza aérea’ del grupo; Osama Tabash, jefe de vigilancia en los servicios de Inteligencia; y Aiman Mabú, otro alto cargo de la formación.
“Durante la noche, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo una ataque a partir de información de Inteligencia contra varios destacados terroristas de Hamás que operaban desde un complejo de mando y control oculto en el área humanitaria de Jan Yunis”, ha explicado.
Así, ha afirmado que Abú Daqa, Tabash y Mabú “estuvieron directamente implicados en la masacre del 7 de octubre –en referencia a los ataques perpetrados por Hamás y otras facciones palestinas contra Israel, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 250 secuestrados– y trabajaron para llevar a cabo actos terroristas contra las FDI y el Estado de Israel durante el último periodo”.
En este sentido, ha defendido sus acciones antes de llevar a cabo el ataque, incluidas medidas para “verificar” la presencia de los sospechosos en la zona y ha argumentado que “las cifras publicadas por el Ministerio de Información de la organización terrorista Hamás, pillado mintiendo en muchas ocasiones, no coinciden con la información en manos del Ejército, las armas usadas y la precisión del bombardeo”.
“A pesar de las muchas medidas adoptadas por las FDI para permitir a los residentes de Gaza estar lejos de las zonas de combate, incluida la definición de una zona humanitaria, Hamás sigue ocultando a sus operativos e infraestructura militar en la zona humanitaria y usando a los civiles como escudos humanos de forma sistemática”, ha apostillado.
En respuesta, Hamás ha rechazado las afirmaciones de Israel sobre la presencia de sus milicianos en Al Mauasi y ha asegurado que se trata de una forma de “justificar sus atroces crímenes”. “Las afirmaciones del ejército fascista de ocupación sobre la presencia de elementos de la resistencia en el lugar de la masacre de Al Mauasi son una mentira flagrante con la que pretende justificar estos crímenes atroces”, ha dicho.
Israel lanzó una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza en respuesta a los citados ataques del 7 de octubre. Desde entonces, las autoridades gazatíes han registrado la muerte de cerca de 41.000 palestinos, a los que se suman más de 690 en Cisjordania y Jerusalén Este en acciones de las fuerzas de seguridad y ataques por parte de colonos israelíes.
