En el mundo hay 1.280 millones de adultos de 30 a 79 años con hipertensión. Pero el 46% de los adultos con ese trastorno de la presión arterial desconoce que lo padece. Además, entre los que sí han accedido al diagnóstico, solo al 42% recibe tratamiento para controlar la presión alta.
Con la idea de que más personas sepan el diagnóstico y se traten de manera adecuada, la Sociedad Europea de Hipertensión (ESH) publicó hace unos días un masterplan para un mejor manejo de la enfermedad.
“Aporta un novedoso formato conciso que apoya la difusión de la información más importante de las Guías para el manejo de la población hipertensa general y su implementación en la práctica clínica”, señalaron los especialistas. Con este fin, la ESH desarrolló un “MASTERplan para el manejo de la hipertensión”, que se publicó en la revista European Journal of Internal Medicine.
En diálogo con Infobae, Analía Aquieri, médica cardióloga y especialista en hipertensión arterial del Hospital de Clínicas “José de San Martín” de la Universidad de Buenos Aires y directora del Consejo Argentino de Hipertensión Arterial de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), comentó: “Se trata de una forma práctica y concisa de organizar toda la información científica disponible sobre el diagnóstico, manejo y tratamiento de los pacientes con hipertensión”.
A través de la regla nemotécnica “MÁSTER plan” en inglés, “se intenta organizar, y así se evitan los olvidos de todos los pasos necesarios para se realice una evaluación integral del riesgo cardiovascular global del paciente, y se controle adecuadamente la hipertensión arterial. De este modo, se asegura un descenso marcado del riesgo de eventos cardiovasculares en el paciente”, dijo Aquieri.
Si no se trata, la hipertensión puede causar enfermedades como insuficiencia renal y enfermedades del corazón, como infartos y ataques cerebrovasculares.
Cuáles son los 4 pasos para un buen manejo de la hipertensión
1 – Medir la presión arterial
El primer paso es la medición precisa de la presión arterial. “Es la piedra angular del diagnóstico y el tratamiento de la hipertensión. Por lo tanto, la medición para diagnosticar la hipertensión representa el primer paso fundamental del MASTERplan.
“Hoy la medición de la presión arterial debe ser realizada con aparatos automáticos validados para tener precisión”, explicó a Infobae el doctor Marcos Marín, ex presidente de la Sociedad Argentina de Hipertensión (SAHA).
Como la medición precisa de la presión arterial es clave para el diagnóstico efectivo, la prevención y el control de la hipertensión, “se puede lograr con el uso de dispositivos electrónicos validados, el uso de un protocolo correcto de medición y la preparación adecuada del paciente”, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
2- Examinar y analizar al paciente
El segundo paso consiste en examinar clínicamente a cada paciente y tener en cuenta los datos de los análisis de glucemia y colesterol, entre otros, y de un electrocardiograma. Si se cuenta con acceso, se recomienda otros estudios como un ecodoppler de los vasos del cuello, entre otros, señaló Marín, quien es coordinador de la sección Hipertensión Arterial del Servicio de Clínica Médica del Hospital Italiano San Justo en Argentina.
Debido a la alta prevalencia de la hipertensión, en el artículo de la sociedad europea se destaca que “es esencial priorizar la evaluación básica a las investigaciones que sean efectivas y factibles en este entorno, permitiendo una implementación generalizada”.
3- Seleccionar el tratamiento
En tercer lugar, si se diagnostica la hipertensión, el profesional de la salud tiene que seleccionar cuál es el tratamiento para el paciente en base a su estado de salud, su edad, y otros criterios.
“El tratamiento está conformado por los cambios en el estilo de vida, que incluyen desde la actividad física diaria y la alimentación saludable, con reducción del consumo de sodio, y por la terapia farmacológica. Generalmente, los pacientes necesitan de dos o más fármacos para controlar el nivel de presión arterial alterado”, afirmó Marín.
4- Evaluar la respuesta al tratamiento
En cuarto lugar, el Masterplan indica que hay que hacer una evaluación de la respuesta al tratamiento. “Significa que después de que el paciente accede al tratamiento, el profesional de la salud tiene que evaluar si alcanzó el objetivo terapéutico. Para la entidad de médicos en Europa, el objetivo debe ser tener la presión por debajo de 140/90. Para los de los Estados Unidos, debería ser menor a 130/90″, precisó el médico.
“Para evaluar si se alcanzó el objetivo terapéutico se aconseja medir la presión fuera del consultorio”, resaltó Marín. Cuando un pacientes recibió 3 fármacos diferentes y no logró bajar la presión alta, se trata de hipertensión resistente. En ese caso, el profesional de atención primaria debería derivar al especialista médico en la afección. También hay casos de hipertensión secundaria, que puede desarrollarse por tener otra patología.
“La prevalencia de hipertensión se encuentra en aumento, como así también el número de pacientes no diagnosticados y no tratados adecuadamente -subrayó Aquieri-. Los esfuerzos tienen que estar dirigidos hacia allí, al desarrollo de guías prácticas, para que sea fácil su comprensión por cualquier profesional de la salud. De esta manera, se podría lograr un mejor control de la hipertensión en el mundo”.
Cómo saber si se tiene hipertensión
La mayoría de personas hipertensas no tienen síntomas, aunque la presión muy alta puede causar dolor de cabeza, visión borrosa, dolor en el pecho y otros síntomas, según la Organización Mundial de la Salud.
La mejor manera de saber si se tiene la tensión alta es tomársela con un aparato automático. Las personas que tienen la tensión arterial muy alta (de 180/120 o más) pueden presentar estos síntomas:
- Dolor intenso de cabeza
- Dolor en el pecho
- Mareos
- Dificultad para respirar
- Náuseas
- Vómitos
- Visión borrosa o cambios en la visión
- Ansiedad
- Confusión
- Pitidos en los oídos
- Hemorragia nasal
- Cambios en el ritmo cardiaco
Si se tienen alguno de esos síntomas y la tensión arterial muy alta, se debe acudir de inmediato a un profesional de la salud.
Infografía: Marcelo Regalado