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Un creador de contenido colombiano perteneciente a la comunidad indígena arhuaca, Gunarey Maku, ha llamado la atención en la plataforma TikTok con un video que muestra cómo preparar una infusión de hoja de coca para tratar la ansiedad, siguiendo las costumbres y tradiciones de su pueblo. Este conocimiento ancestral, que se comparte con el mundo digital, es una muestra de la riqueza cultural de los pueblos indígenas y sus prácticas naturales de sanación.
El reconocimiento de la hoja de coca, utilizado en rituales y como planta medicinal por varias tribus indígenas de Colombia y Latinoamérica, ha ganado interés en el ámbito científico por los beneficios que recientes estudios han revelado, incrementando su popularidad más allá de las comunidades originarias.
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Aunque la hoja de coca está sujeta a fiscalización internacional por sus componentes psicoactivos, las formas tradicionales de consumo, como las infusiones, se distancian del uso ilícito asociado al narcotráfico y sus derivados procesados.
En el video compartido por Maku, que ya supera las 110.000 visualizaciones y cuenta con más de 8.000 interacciones, se hace especial hincapié en el respeto y conexión espiritual con la naturaleza que caracteriza la recolección y uso de la coca por parte de su comunidad. Destacando la importancia del número siete por su significado cultural, el influencer detalla cómo se deben seleccionar las hojas frescas durante la recolección, un acto precedido por un permiso consciente a la naturaleza, ilustrando la relación armónica entre su pueblo y el medio ambiente.
“Hay que hacerlo con buen pensamiento”, remarca. Luego, el influenciador indígena dice que hay que “arrancar la hoja más fresca, la que se ve que salió apenas” y asegura que tienen que ser siete hojas porque el siete, dicen los mamos, es el número de la fuerza, de los buenos pensamientos.
“Echamos la hoja de coca en un recipiente pequeño para poder cocinarla”, expone el indígena sobre la preparación en una olla con agua. Debe ponerse al fuego, dice Maku, por al menos cinco minutos.
Por otro lado, la preparación de la infusión, realizada con sumo cuidado siguiendo los pasos descritos por Maku, culmina con un agua de color verde intenso, señal de que estará lista para su consumo tras ser ‘rezada’ por una integrante de la tribu. Este paso refuerza la dimensión espiritual y terapéutica de la bebida según las creencias arhuacas.
El uso de la hoja de coca como remedio para la ansiedad y otros malestares emocionales ha sido transmitido por los mamos, líderes espirituales de la comunidad, que han guiado a sus miembros en prácticas de bienestar físico y espiritual por generaciones, de acuerdo con lo descrito por Maku.
A pesar del interés que despierta el video y la información que transmite sobre el uso tradicional de la planta, es importante señalar que la inclusión de la hoja de coca en el listado de sustancias sujetas a control por parte de la Comisión de Estupefacientes de la ONU, lo que implica una serie de regulaciones que limitan su comercialización y distribución.
Los matices culturales y de salud pública que rodean el consumo de la hoja de coca representan un desafío y a la vez una oportunidad para ampliar el diálogo en torno a prácticas indígenas y su lugar en el mundo contemporáneo. El video de Gunarey Maku y su difusión amplia en redes sociales ponen de manifiesto cómo el conocimiento ancestral puede coexistir e influir en la modernidad, lo cual generó diversos comentarios en dicha plataforma.
“Mis ancestros no eran de ninguna tribu, pero tmb curaban con llervas y tmb decían que tenían que pedirle permiso a la naturaleza”; “🥰🥰🥰las plantas son medicina amo la madre tierra”; “yo la usa para la soltura de barriga y es muy buena”; “yo la usa para la soltura de barriga y es muy buena”; fueron algunos de los comentarios que recibió Maku.
