A pocos días de celebrar el Día de la Madre en el Perú, ya son muchos los que vienen preparando más de una sorpresa para homenajear a la autora de nuestros días de la mejor manera. Desde regalos, salidas, paseos, rosas, las manifestaciones de amor son infinitas para conmemorar esta fecha tan especial.
Pero lo que muchos no saben es que este día tiene sus raíces en un movimiento impulsado por el deseo de reconocimiento y homenaje a las madres en todo el mundo.
Sin embargo, su instauración en nuestro país no fue un proceso sencillo, sino el resultado de la iniciativa de un grupo de jóvenes estudiantes y el respaldo de la opinión pública que la llevaron a ser lo que es hoy día.
Antecedentes mundiales
El movimiento que dio origen al Día de la Madre se remonta a Estados Unidos a principios del siglo XX, cuando Anna Jarvis, inspirada por las palabras de su madre, Ann Reeves Jarvis, abogó por la creación de una fecha especial para honrar el sacrificio y el servicio de las madres.
Su persistencia y dedicación llevaron a que en 1911 todos los estados de la Unión reconocieran la celebración del Día de la Madre, y tres años después se estableció oficialmente como feriado el segundo domingo de mayo.
El Primer Día de la Madre en Perú
En nuestro país, la historia del Día de la Madre comienza durante el gobierno de Augusto B. Leguía, cuando un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos se reunieron en el centro ‘Ariel’ y decidieron que era hora de instaurar esta celebración en territorio nacional.
Poco a poco, esta iniciativa ganó apoyo popular y, finalmente, el parlamento peruano aprobó la medida mediante la Resolución Suprema N.º 677 el 12 de abril de 1924. De esta manera, dando lugar al primer Día de la Madre en Perú el 11 de mayo de ese mismo año.
La celebración inaugural
Con la confirmación de esta nueva efeméride en el calendario nacional, la primera celebración del Día de la Madre en Perú fue un evento emotivo y memorable. Los colegios organizaron actividades especiales, incluyendo ceremonias en homenaje a las madres.
Uno de los momentos destacados tuvo lugar en el Parque de la Exposición, donde la filántropa Juana Alarco de Dammert fue honrada en un acto encabezado por el rector de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Manuel Vicente Villarán. La presencia de esta figura emblemática en la educación nacional agregó un toque especial a la festividad, que también contó con la participación de niños huérfanos, quienes expresaron su cariño y gratitud hacia ella.
A lo largo de los años, esta fecha se fue volviendo cada vez más especial y ha servido para que las diversas autoridades del país aprovechen en rendir un justo homenaje a todas las madres peruanas en todas sus facetas.
Un claro ejemplo de eso, fue lo que ocurrió en 1967, cuando el entonces presidente peruano Fernando Belaúnde Terry otorgó el título de “Madre Campesina 1967″ a una mujer de Huancayo, reconociendo así la labor y el sacrificio de las madres en el ámbito rural.
Un legado de amor y reconocimiento
El Día de la Madre, tanto en Perú como en todo el mundo, es más que una simple celebración; es un tributo al amor incondicional, la dedicación y el sacrificio que las madres brindan a sus hijos y a la sociedad en su conjunto.
Aunque su origen puede rastrearse hasta un acto de amor filial en Estados Unidos, su impacto se ha extendido a nivel global, inspirando gestos de gratitud y aprecio hacia las madres en todas partes del mundo, incluyendo el hermoso país de Perú.
