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La presidenta Dina Boluarte censuró la publicación del informe sobre la pobreza monetaria en Perú al 2023, un documento que el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) iba a hacer público este miércoles. Según un despacho difundido por Canal N, que cita fuentes oficiales, la mandataria tomó la decisión al conocer el aumento de las cifras y para evitar la emisión de “malas noticias”.
De acuerdo con la agenda oficial, en su sesión comenzada a las 9:00 horas, el Consejo de Ministros examinó estos resultados derivados de la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO 2023). Posteriormente, a las 20:00 horas, el INEI comunicó que la divulgación se aplazaría “hasta la próxima semana por razones de fuerza mayor”.
Rosa María Palacios, abogada y columnista de La República, confirmó a través de una fuente que se ha “prohibido” la publicación del documento. Por su parte, la congresista Susel Paredes (Cambio Democrático-Juntos por el Perú) criticó la falta de transparencia del Ejecutivo. “Es evidente que el Gobierno sostenido por el fujimorismo y sus socios no quieren que sepamos la realidad”, señaló en X, antes Twitter.
Para el cierre de 2022, la tasa de pobreza en el país alcanzó el 27,5% (más de 9 millones de personas), un incremento notorio respecto al año anterior y sustancialmente más alto que en 2019, con 2 millones 694 mil personas adicionales en situación de pobreza pospandemia.
A pesar de que la pobreza rural se mantuvo constante comparada con 2019, la urbana incrementó en 9,5 puntos porcentuales. El análisis realizado en 2022 destacó carencias multidimensionales en la población, como el 40,1% que no tiene acceso a Internet, el 50,5% que carece de agua potable de red pública y el 64,9% de los trabajadores mayores de 14 años que no están afiliados a ningún sistema de pensiones
De acuerdo con analistas consultados por Semana Económica, para 2023 se espera que la tasa de pobreza en Perú se sitúe entre el 28.5% y el 31%, superando la cifra registrada en 2022. Esto implicaría que casi un millón más de peruanos caerían en esa situación, con lo cual el país retornaría al nivel observado en 2020, en medio de conflictos sociales, eventos climáticos adversos y recesión económica.
En desarrollo.
