El precio internacional del petróleo superó este lunes los USD 80 por barril. El aumento acumulado es de casi 13% desde el ataque de Irán con más de 100 misiles contra Israel del pasado martes, mismo día en que YPF decidió una baja en los precios locales de sus combustibles. En la industria local analizarán en las próximas horas si el cambio de tendencia del crudo los obligará a aplicar nuevos aumentos en la nafta y el gasoil en los surtidores.
Horacio Marín, presidente de YPF, líder del mercado local de combustibles, se reunirá esta semana con los miembros del área de downstream, donde se discuten los precios, y analizarán la situación según indicaron a Infobae desde la petrolera estatal. Será después de la gira que emprendió el ejecutivo por Europa en busca de compradores para el megaproyecto de GNL.
“Es pronto todavía para saber qué es lo que va a pasar con los calores en los surtidores. En caso de que haya algún cambio, sería para el mes que viene o en un par de semanas. Dependerá de cómo siga la tendencia del crudo y si recrudece o no el conflicto, entre otros muchos factores. Cuando haya una decisión, la vamos a comunicar”, señalaron desde YPF.
Hace menos de una semana la tendencia en el precio del barril se mantenía a la baja desde hacía por lo menos seis meses. La presión a la baja tenía que ver con las preocupaciones sobre el débil crecimiento económico global y exceso de oferta de crudo en el mercado. Fue en ese marco que YPF informó que bajaría el precio de sus combustibles por primera vez en más de cinco años.
El recorte fue de 1% en nafta y 2% en gasoil, unos $11 y $13 por litro, respectivamente, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Los combustibles acumulan un aumento superior al 250% anual promedio. Sus competidoras Shell, Puma y Axion siguieron los mismos pasos.
“Quiero realizar un acuerdo justo con los consumidores. Nadie tiene que subsidiar a nadie. Ni nosotros a los consumidores ni los consumidores a nosotros. En consecuencia, si el precio del crudo internacional sube, el precio de los combustibles localmente va a subir. Si el precio baja, vamos a bajar”, había dicho Marín el martes pasado.
“Es pronto todavía para saber qué es lo que va a pasar con los calores en los surtidores. En caso de que haya algún cambio, sería para el mes que viene o en un par de semanas” (YPF)
El barril de petróleo conocido como Brent se utiliza como referencia en el mercado europeo, también en la Argentina, y es una de las tres principales para los inversores del hidrocarburo. Comenzó el año en la zona de los USD 76, saltó a los USD 91 en abril y se mantuvo a la baja hasta el martes pasado, cuando encontró piso en los USD 69 por barril. Desde ese momento acumula un salto del 13% en cinco días hábiles (USD 81), del 13% en el último mes pero se mantiene 10% por debajo de lo que cotizaba hace seis meses.
El despertar de los precios internacionales puede poner presión nuevamente sobre los precios que pagan los consumidores en los surtidores. “Con los aumentos sostenidos que se vienen haciendo del impuesto al combustible (1% mensual y muy atrasado), del tipo de cambio (2% mensual) y en los costos de nuestras operaciones (con inflación en pesos superando la devaluación), efectuar una baja de precios en surtidor debido solo a una reducción en la cotización de crudo, va a requerir alzas cuando el crudo suba, es decir un acople al mercado internacional”, explicaron desde una de las compañías del mercado.
En los últimos días algunas firmas advertían por los riesgos de bajar sus combustibles: “Hay que entender si no resulta muy prematura esa baja de precios ya que no se sabe si la reducción del precio del crudo se extenderá en el tiempo. Esta iniciativa de bajar precios, significa un doble esfuerzo para la industria, pues se absorbe también la suba del 1% del impuesto y del 2% del crawling peg”.
En la industria local también hay preocupación por el desplome en el consumo de combustibles de los últimos meses derivados de los aumentos y de la recesión. En agosto las ventas de nafta y gasoil cayeron 9,2% interanual, mientras que acumularon nueve meses consecutivos en retroceso, con el agravante de que se observa una marcada aceleración en la velocidad del retroceso (en julio había sido 5,2%) según los datos oficiales relevados por la consultora Politikon Chaco. Hubo una merma de 3,2% contra el mes anterior.
Se observa que las mayores caídas se dan en los combustibles que son más caros. “En referencia a sus desempeños, la nafta exhibió una caída del 7,7% interanual con marcada disparidad según el segmento: la nafta súper cae 3,5% interanual pero las premium lo hacen en -19,2%. Respecto al gasoil, el resultado global fue de caída del 10,9% interanual: dentro de este, el común cayó 13,2% y el premium lo hizo en -6,2%. En ambos, hay aceleración en la velocidad de descenso”, precisó Politikon Chaco.