Cheng “Charlie” Saephan, un inmigrante de Laos radicado en Portland, fue el afortunado ganador del colosal bote de Powerball de 1,3 mil millones de dólares el pasado 7 de abril de 2024. Este premio se posicionó como el cuarto mayor del Powerball y el octavo en la historia de todas las loterías en Estados Unidos.
En una conferencia de prensa organizada por la Lotería de Oregon, Saephan compartió su historia que cruza la adversidad con la suerte: lucha contra el cáncer desde hace ocho años.
De acuerdo con The Chicago Tribune, Saephan, junto con su esposa Duanpen y su amiga Laiza Chao, quienes colaboraron juntos comprando los billetes, decidieron aceptar el premio en un pago único, neto de 422 millones de dólares después de impuestos, que representa no solo un cambio de vida para Saephan y su familia sino también una luz de esperanza en su lucha contra el cáncer. “Estaré en capacidad de proveer para mi familia y para mi salud”, declaró Saephan con emoción.
La historia detrás de este increíble golpe de suerte comenzó cuando Laiza Chao, tras contribuir con 100 dólares para la compra de un lote de boletos, envió una foto de estos a Saephan con el mensaje “Somos millonarios”. Esta premonitoria broma previa al sorteo se convirtió en realidad al día siguiente, marcando el fin de un periodo de más de tres meses sin ganadores en el Powerball.
El ticket ganador, que aguardó más de tres horas para ser revelado debido a un retraso en el sorteo, acertó los seis números necesarios para llevarse el gran premio. Powerball especificó que los números ganadores sorteados en la madrugada del domingo fueron: 22, 27, 44, 52, 69 y el Powerball rojo 9, publico el New York Post. Esta combinación de cifras fue la clave para que el afortunado poseedor del boleto se convirtiera en el centro de una de las mayores victorias en la historia de la lotería en Estados Unidos.
La Lotería de Oregon destacó que se requirió un proceso de seguridad y verificación antes de poder anunciar la identidad del afortunado ganador, conforme a las leyes estatales que, salvo algunas excepciones, no permiten el anonimato de los jugadores. Los ganadores disponen de un año para reclamar el premio mayor. El billete ganador fue vendido a principios de abril en una tienda Plaid Pantry en Portland.