(MIGUEL GUTIERREZ/)
Durante la posesión de Iris Marín como defensora del Pueblo, acto realizado en Nuquí, Chocó, el presidente Gustavo Petro señaló a las periodistas de ser “muñecas de la mafia”.
Las palabras del primer mandatario han generado múltiples rechazos y hasta ya se iniciaron acciones legales para que el jefe de Estado se retracte de lo afirmado.
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En horas de la mañana de este martes 10 de septiembre, se conoció que el Consejo de Estado recibió una tutela interpuesta por el abogado Germán Calderón España, en la que solicita a los magistrados del alto tribunal que el presidente ofrezca disculpas públicas a las comunicadoras del país, y pedir que se le restrinja usar este tipo de comentarios en actos públicos.
“Que se le ordene al Presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, ofrecer públicamente una retractación y a ofrecer una disculpa pública en favor de las víctimas (…) que se le prohíba usar esta clase de expresiones discriminatorias contra las mujeres periodistas colombianas a futuro”, se lee en la demanda.
A su vez, el jurista solicitó tutelar los derechos fundamentales de las mujeres periodistas colombianas, especialmente, el de la dignidad humana, y explicó que esta demanda se realiza ante el Consejo de Estado, al considerar que “cualquier acción contra el presidente va dirigida a la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes, donde bien podría tardarse 20 años en obtenerse una resolución, mientras las mujeres periodistas colombianas siguen siendo vulneradas en sus derechos fundamentales”.
Igualmente, Calderón España mencionó que el uso de la expresión “muñecas de la mafia” tuvo la intención de “causar un daño psicológico” contras las comunicadoras.
“No nos podemos quejar perplejos ante esa descalificación, especialmente, de quien proviene, sin que haya una sanción moral ante la sociedad y ante las víctimas, por lo cual se requiere de medidas urgentes e impostergables”, subrayó el abogado en la tutela.
La tutela de Germán Calderón España ante el Consejo de Estado responde a la propuesta hecha por el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien mencionó que el comentario del presidente Gustavo Petro a las comunicadoras colombianas, además de ser ofensivo, ameritaba interponer acciones legales.
Según el exvicepresidente, “es falso” que alguna periodista colombiana pueda ser catalogada de esa manera, y añadió: “Yo las invitaría a que formulen una denuncia”.
Es la segunda demanda presentada ante el Consejo de Estado contra el mandatario de los colombianos, luego de que esta instancia aceptara una demanda de Enrique Vargas Lleras, hermano del líder político colombiano, donde le ordenan al presidente rectificar las afirmaciones que había hecho sobre su rol en la Nueva EPS.
Según el fallo, el mandatario había dicho que la familia Vargas Lleras había fundado la Nueva EPS y que Enrique Vargas, mientras formaba parte de la junta directiva, ocultó facturas por más de 5 billones de pesos. La Corte Suprema determinó que estas afirmaciones no eran ciertas, sentando un precedente en la historia judicial de Colombia, y exigió al presidente que rectificara dichas acusaciones.
El comentario de Petro que generó rechazo en el país
El pasado 30 de agosto, durante su intervención en la posesión de Iris Medina como nueva defensora del pueblo, el presidente Gustavo Petro se refirió fuertemente al trabajo de la prensa colombiana, específicamente, a la labor que han hecho las mujeres.
“Las periodistas del poder, las muñecas de la mafia, construyeron la tesis del terrorismo en la protesta y la criminalización del derecho genuino a protestar y a decir basta”, expresó Petro en el acto público.
Este comentario generó una oleada de críticas tanto de los dirigentes políticos como de la prensa colombiana. Una de ellas fue la directora de Revista Semana, Vicky Dávila, quien consideró que “fue una frase que tiene una carga de profundidad. MISOGINIA pura, MACHISMO”.
Las críticas también vinieron desde el Gobierno, como es el caso de la defensora del pueblo, Iris Marín, quien en sus redes sociales, también se sumó a los cuestionamientos contra el mandatario. “No esperen de mí como Defensora del Pueblo que justifique el lenguaje discriminatorio o que estigmatiza a las mujeres (…) rechazo toda forma de violencia contra las mujeres”, comentó.
