En una serie de movimientos polémicos que resuenan en el Gobierno del presidente Gustavo Petro, parece que algunos ministros están devolviendo favores entre ellos. El viernes 2 de agosto, la Presidencia de la República confirmó que la exministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, será la nueva asesora del Ministerio de Hacienda.
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El 2 de julio de este año, Mojica fue apartada de su cargo en el tercer remezón presidencial debido a los bajos resultados obtenidos en su gestión. Sin embargo, en menos de dos meses, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, la recibió en su despacho, lo que despertó interrogantes acerca de las posibles razones detrás de esta designación.
Un intercambio de favores
Lo paradójico y controversial de esta situación es que Jhenifer Mojica, cuando ocupaba el cargo de ministra de Agricultura, había nombrado a Liliana Cortés, esposa del ministro Ricardo Bonilla, en la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra). Este nombramiento generó en su momento una intensa polémica y fue tema de debate en varios medios de comunicación.
En una declaración a W Radio, Bonilla defendió el nombramiento de su esposa explicando: “Llevo con mi esposa más de 20 años y es especialista en temas agrarios. Yo no la estoy nombrando, fue la ministra de Agricultura quien le propone estar allí. Es decir, no está llegando porque yo esté diciendo, es por la ministra que la conoce”.
La designación de Mojica en el Ministerio de Hacienda ha sido vista con suspicacia por algunos opositores que han criticado su desempeño como ministra de Agricultura, principalmente por no haber materializado la reforma agraria promovida por Gustavo Petro.
A pesar de las críticas, Mojica ha logrado mantenerse en el radar político y, tras un breve receso, reaparece en las filas gubernamentales en un papel asesor. Curiosamente, no es la única opción contemplada para ella, ya que también suena como posible candidata a la Defensoría del Pueblo. El martes 23 de julio, Mojica confirmó su intención de postularse a ese cargo, argumentando que es una abogada dedicada a la defensa de los derechos humanos y al estudio del conflicto social en Colombia.
Según Cambio, su incorporación se produce justo en un momento crucial, cuando se está debatiendo el presupuesto para el año 2025, una discusión en la que el sector agropecuario está saliendo particularmente perjudicado.
Durante su mandato en la cartera de Agricultura, Mojica estuvo expuesta a un entorno político inestable y enfrentó desafíos significativos. Se enfrentó a tensiones notorias con el exdirector de la Agencia Nacional de Tierras, Gerardo Vega, debido a discrepancias en las cifras relacionadas con la compra y formalización de tierras, un tema relevante para la reforma agraria impulsada por el actual gobierno.
El impacto de esta reubicación en el Ministerio de Hacienda resalta, principalmente porque se da en un contexto de restricciones financieras para el sector agropecuario. Según el proyecto presupuestal que el Gobierno le presentó al Congreso, en 2025 el sector agrícola podría enfrentar una reducción de alrededor de 4 billones de pesos respecto a lo asignado para 2024.
La asesoría de Mojica será crucial para orientar el direccionamiento adecuado de los recursos desde Hacienda hacia entidades como el Ministerio de Agricultura, la Agencia de Desarrollo Rural y la Agencia Nacional de Tierras. Estos organismos desempeñan un papel fundamental en la implementación de políticas agrícolas y de desarrollo rural que son vitales para el sostenimiento económico del sector agropecuario y la reducción de la pobreza en las áreas rurales.
Antes de su paso por el Ministerio, dirigió la unidad de Asuntos Étnicos de la Unidad de Restitución de Tierras (URT), y también ejerció como subdirectora de la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), entre otras funciones. Su historial profesional incluye trabajos con la Asociación de Autoridades Arhuacas de la Sierra Nevada y la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad.
La relevancia de Mojica en el contexto actual no puede subestimarse. Dada su formación y experiencia, su rol como asesora en el Ministerio de Hacienda podría ser determinante para enfrentar los recortes presupuestales y formular estrategias que, aunque difíciles, buscan sostener la integridad del sector agropecuario en medio de una coyuntura económica complicada.
El retorno de Mojica al Ministerio de Hacienda viene a reafirmar la importancia del campo en la política pública del país y la necesidad de articular esfuerzos entre las diferentes entidades del Gobierno para garantizar que a pesar de los recortes presupuestales, se mantenga un apoyo sostenido al sector agropecuario. Sin embargo persisten las dudas alrededor de si es o no un intercambio.