Marcela Miró, primera mujer presidenta de Les Corts Valencianes y exconsellera durante los gobiernos autonómicos del PP de Eduardo Zaplana, ha fallecido este domingo a los 72 años.
Así lo ha confirmado el secretario general del PPCV, Juanfran Pérez Llorca, en un mensaje en redes sociales en el que ha trasladado su pésame a los familiares y amigos de Marcela Miró.
“Una compañera que ha trabajado siempre por los ciudadanos tanto al frente de las consellerias que ha ocupado como en su labor como presidenta de Les Corts. Una gran mujer”, ha manifestado el ‘número dos’ del PP valenciano.
La actual presidenta de Les Corts, Llanos Massó (Vox), también ha expresado sus condolencias por el fallecimiento. “Que Dios la tenga en su gloria y proporcione el consuelo a sus allegados. Descanse en Paz”, ha escrito en redes sociales.
Marcela Miró, nacida en València en 1952 y con tres hijos, fue la primera mujer en presidir el parlamento valenciano en la V Legislatura (1999-2003), un puesto que después han ocupado Milagrosa Martínez (PP) y Llanos Massó. Previamente fue consellera de Educación, Cultura y Ciencia y de Bienestar Social.
Doctora en Ingeniería Agrónoma española y licenciada con el número uno de su promoción en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de la Universitat Politècnica de València (UPV) en 1975, Marcela Miró ejercía en la actualidad como síndica de Comptes.
A CABALLO ENTRE EL SIGLO XX Y EL XXI
En el momento de conocer su designación como presidenta, Marcela Miró destacó “el reto de ser una mujer al frente de las Cortes Valencianas” y auguró que la legislatura que se avecinaba sería “muy importante y estará a caballo del siglo XX y del siglo XXI”.
En el año 2000, en el 20 aniversario del Estatut d’Autonomia, manifestó la necesidad de una reforma de esta norma con el “máximo consenso posible”: “Lo valencianos queremos más, necesitamos más y estamos en un grado de madurez diferente”.
Su presidencia también coincidió con la creación de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), sobre lo que defendió que esta institución debía “asumir el protagonismo y “llevar las iniciativas” en el ámbito lingüístico, en tanto que el papel de los partidos políticos había de ser el de “dar el margen de confianza y de tiempo” para que comenzara su andadura.
En el último 25 d’Abril de la V Legislatura, Miró celebró que había tenido la oportunidad “impagable” de asistir a “acuerdos históricos” durante “cuatro años defendiendo lo que cada uno, desde su legítima ideología y postura, cree que es lo mejor para todos”: “Cuatro años dedicados en cuerpo y alma a la representación democrática, a hacer realidad palpable el debate y el diálogo como instrumentos de crecimiento y progreso”.
“Nuestra responsabilidad como políticos, como representantes democráticos, como servidores públicos que somos de los intereses de los valencianos por encima de cualquier interés que no sea el de trabajar más y mejor por nuestra sociedad”, reivindicó.
En clave política, en una entrevista a Europa Press en 1996, Miró afirmó que no dudó un instante en aceptar el “reto” de dirigir la política de social de la Generalitat. “Soy fiel al programa político del Partido Popular porque es un programa muy adecuado y muy bien realizado y planificado”, aseveró.
