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Ginger es una pitbull de pelaje marrón que se convirtió en la madre sustituta perfecta de un hogar de acogida de gatos bebé. La perra consuela, acompaña y cuida de todos los felinos que su dueña recibe en la casa.
Sus habilidades son extraordinarias, pues su propietaria admitió que no ha visto a ningún gato, incluso si al principio se mostraban reacios a contar con “una madre sustituta canina”, irse del hogar de acogida sin amar a Ginger. La mujer considera que esta capacidad inigualable es alguna clase de “magia”.
Gracias a la amabilidad, empatía, cariño y cuidados que proporciona a los felinos, Ginger se convirtió en la mascota oficial del centro de rescate de su dueña, quien está segura de que la pitbull cambió por completo el rumbo de su vida.
Amor y compasión infinitos
En diálogo con el canal de YouTube Geo Beats Animals, Susan Hicks, dueña de la perra, contó que Ginger llegó a su vida después de que aceptara darle un hogar de acogida. Al poco tiempo ella dio a luz a nueve cachorros, de los cuales todos encontraron una familia permanente.
Cuando era momento de encontrarle a Ginger un hogar, Hicks descubrió que había generado un vínculo especial y no podía separarse de ella. “Era tan dulce, amable y gentil”, recordó.
En aquel entonces, la mujer cuidaba de un grupo de gatos recién nacidos y notó que a todos ellos les encantaba pasar el tiempo con Ginger y que disfrutaban mucho de su compañía.
“Pensé que si quería seguir dando acogida y rescatando animales, ella sería un increíble miembro para el hogar permanente”, admitió Hicks.
Cuando recibe a gatos desamparados en su hogar, Ginger les permite que se acerquen a ella como si estuvieran alimentándose de su leche materna, aunque eso no ocurra de verdad. Su dueña dijo que la pitbull entiende que necesitan ser aseados, sabe cuándo deben recibir su alimento y observa a la cuidadora mientras les da de comer.
“Algunos de los gatitos mayores son un poco más ‘resistentes’ al hecho de tener una madre sustituta canina, pero después de un tiempo ella siempre los convence. No recuerdo a ningún felino que haya llegado escéptico y se retirara con el mismo pensamiento”, contó Hicks.
La mujer celebró que Ginger tenga un “efecto curativo” y que sólo basta su presencia para alegrar la vida de los felinos bajo su cuidado que llegan enfermos o que no cuentan con la protección de sus madres.
“Cuando tienen miedo o sienten frío, ella simplemente estará ahí para ellos. Su calma y energía maternal es genial para estos gatitos que son adoptados por familias donde tienen a otros perros”
Cariño y cuidados sin comparación
Hicks señaló que Ginger es la mascota oficial de su rescate animal y confesó que adoptarla cambió el curso de su vida por completo.
“Tomé decisiones profesionales que me permitieron estar aquí más a menudo para que pueda fomentar acoger a cada vez más gatitos”, dijo la dueña de Ginger, quien cuenta con antecedentes en ciencia y medicina y busca aplicar sus conocimientos para ayudar a aquellos animales que están enfermos o que necesitan de atención médica.
Hicks no entiende del todo qué hay detrás de “la magia de Ginger” ni qué logra que algunos gatos cambien por completo después de convivir con la perra, sin embargo, es la capacidad de la pitbull lo que hace que ame su trabajo.
“Parte de lo que disfruto hacer es demostrarle al mundo que los pitbulls son dulces, cariñosos y amables y no son esas horribles criaturas que los medios a menudo retratan”, concluyó Hicks.
