La muerte de Fabián Orlando Barreto Ballestas, un camionero de 42 años, está siendo investigada por las autoridades, luego de ser encontrado sin vida en un hotel de Itagüí en circunstancias aún no del todo esclarecidas. El suceso ocurrió el martes 9 de julio, según indicaron las autoridades.
Todo comenzó cerca de las 4:50 de la madrugada, cuando Barreto Ballestas y su amigo, junto con dos mujeres, llegaron a un hotel después de haber estado en un bar en la zona de tolerancia del barrio Santa María. El amigo de Barreto permitió que las mujeres abandonaran el hotel alrededor de las 6:00 de la mañana, ya que Barreto se encontraba durmiendo profundamente.
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Sin embargo, luego de tres horas, el amigo notó que Barreto había dejado de roncar y, al no poder despertarlo, alertó al personal del hotel, según informaron medios locales sobre el testimonio del hombre, que no ha sido identificado.
Entonces las autoridades fueron notificadas de inmediato y confirmaron que Barreto Ballestas no presentaba signos vitales. Agentes del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía realizaron una inspección en el lugar para intentar determinar las causas de la muerte, aunque no pudieron establecerlas en ese momento.
Ahora, la responsabilidad de esclarecer las causas del fallecimiento está en los hombros de Medicina Legal. Además, el papel del amigo de Barreto Ballestas, quien autorizó la salida de las mujeres, también está bajo escrutinio por parte de las autoridades para descartar cualquier implicación.
Entre tanto, la comunidad de Itagüí se encuentra consternada por el incidente. Las investigaciones continúan con el fin de arrojar luz sobre los hechos y brindar respuestas a la familia del fallecido.
Fabián Orlando Barreto Ballestas era un camionero que, según conocidos, era una persona trabajadora y comprometida con su oficio. Una allegada a Ballestas escribió en su perfil de Facebook: “Hoy tu partida deja un vacío imposible de llenar, pero tu amor y tus recuerdos continuarán viviendo en mi corazón para siempre, aunque ya no estés físicamente a mi lado, tu presencia se hace sentir en cada momento, en cada recuerdo, en cada lágrima, en mi casa se siente tu ausencia y duele profundamente. La vida sin ti no será la misma pero el amor que me regalaste seguirá iluminando mi camino, siempre te llevaré conmigo en mi corazón y pensamientos. Gracias por todo fuiste más que un hermano, amigo y cómplice descansa en paz del señor (sic)”.
Cárcel para dos hombres que habrían desaparecido a Kelly Johana, empresaria de Ibagué
Kelly Plazas había sostenido una relación sentimental con uno de los investigados, Fidel Borrero, lo cual agrega una dimensión adicional al caso. La Fiscalía argumentó que esta relación previa fue un factor importante en la planificación de la desaparición. “El vínculo sentimental previo entre Borrero y la víctima fue determinante en la forma en que se llevó a cabo la retención,” señaló un oficial del Gaula. Los dos hombres no aceptaron los cargos.
La víctima había llegado al sector La Cabañita, en la vereda Río Frío de Rivera, con la intención de vender una finca. Sin embargo, fue forzada a subir a un vehículo por un hombre que también estaba en el lugar. Desde ese día, el paradero de Kelly Plazas sigue siendo desconocido. La Fiscalía, en coordinación con el Gaula del Ejército Nacional, capturó a los dos hombres el 13 de junio de 2024 en Neiva.
Las pruebas que llevaron a la detención de Borrero Solano y Puentes Ortega incluyen interceptaciones telefónicas, videos de cámaras de seguridad y entrevistas a testigos. “Fue crucial la llamada que Borrero Solano, la expareja sentimental de la víctima, realizó poco antes del hecho para definir cómo se daría la retención,” dijo la Fiscalía.
Además de las llamadas, también se estableció que los procesados estuvieron presentes en el lugar de los hechos. Las actividades de policía judicial confirmaron, además, que la retención de Kelly Plazas fue planeada con anterioridad y ejecutada meticulosamente.
Kelly Plazas había sostenido una relación sentimental con uno de los investigados, Fidel Borrero, lo cual agrega una dimensión adicional al caso. La Fiscalía argumentó que esta relación previa fue un factor importante en la planificación de la desaparición. “El vínculo sentimental previo entre Borrero y la víctima fue determinante en la forma en que se llevó a cabo la retención,” señaló un oficial del Gaula. Los dos hombre no aceptaron los cargos.