La oficina de Derechos Humanos de la ONU ha pedido este viernes a Egipto que libere “de inmediato” al opositor Ahmed Tantawi, exlíder del Partido Karam (Partido de la Dignidad), quien fue detenido el lunes después de que la Justicia confirmara la condena de un año de prisión en su contra por imprimir formularios no autorizados para su candidatura para los comicios del pasado mes de diciembre.
“Hacemos un llamamiento a las autoridades egipcias a que liberen de inmediato a Tantawi y otras personas detenidas indebidamente por ejercer sus derechos fundamentales, en particular la libertad de opinión, expresión y asociación”, ha indicado en un comunicado la portavoz de la oficina, Marta Hurtado.
Hurtado se ha mostrado “profundamente preocupada” por esta decisión de la Justicia egipcia y ha expresado que esto es una muestra más de “la continua represión contra la disidencia y las figuras de la oposición en Egipto”.
“También nos preocupan las violaciones al debido proceso denunciadas durante el juicio, incluyendo los obstáculos para acceder a los expedientes del caso para la preparación de una defensa adecuada”, ha agregado.
El tribunal le condenó a un año de prisión en febrero y le prohibió presentarse a las elecciones durante un periodo de cinco años, mientras que también le ordenó el pago de una multa de 20.000 libras egipcias (390 euros, al cambio actual).
Tantawi abandonó a mediados de octubre la carrera presidencial, en la que competía contra el actual presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, por no conseguir las 25.000 firmas que exige la ley electoral para constituirse como candidato a nivel oficial.
La organización Human Rights Watch (HRW) acusó al Gobierno de Al Sisi –en el poder desde el golpe de Estado de julio de 2013 contra el entonces presidente islamista Mohamed Mursi– de promover una campaña de intimidación, arrestos y de pedir requisitos excesivos a candidatos para evitar cualquier tipo de competencia.
Al Sisi tomó posesión a principios de abril tras imponerse con cerca del 90 por ciento de los votos en unas elecciones en las que no tuvo enfrente candidatos opositores de peso. La ceremonia sirvió de inauguración de la primera fase de la Nueva Capital Administrativa, a la que quiere trasladar las principales instituciones del Estado.