El vicecoordinador especial y coordinador residente de la Oficina de Naciones Unidas del Coordinador Especial para el Proceso de Paz en Oriente Próximo (UNSCO, por sus siglas en inglés), Muhannad Hadi, ha denunciado este jueves que Israel ha emitido doce órdenes de evacuaciones desde que comenzó el mes, forzando a alrededor de 250.000 personas ha desplazarse de nuevo.
Hadi, que ha destacado que estas órdenes se producen de media cada dos días, ha señalado que esta misma semana decenas de miles de civiles de cuatro barriadas de Deir al Balá y Jan Yunis han recibido esta orden, que afecta también a varias agencias de Naciones Unidas y ONG, así como a sus familias.
Asimismo, ha precisado que las sucesivas órdenes de evacuación masivas por parte de las autoridades israelíes han desplazado al 90 por ciento de los residentes de la Franja desde octubre, exponiéndoles en múltiples ocasiones a riesgos para su integridad y privándolos de los servicios básicos para sobrevivir.
“Si las órdenes de evacuación tienen como objetivo proteger a los civiles, lo cierto es que están provocando exactamente lo contrario: están obligando a las familias a huir de nuevo, a menudo bajo fuego y con las pocas pertenencias que pueden llevar consigo, hacia una zona cada vez más reducida, superpoblada, contaminada, con servicios limitados y, como el resto de Gaza, insegura”, ha denunciado.
El suministro de agua en Deir al Balá ha disminuido al menos un 70 por ciento por el cierre de plantas de desalinización situadas en las zonas de evacuación, lo que, sumado a la escasez de cloro par ala desinfección de agua, está alimentando infecciones cutáneas, hepatitis A y polio.
“Los civiles están exhaustos y aterrorizados, corriendo de un lugar destruido a otro, sin que se vislumbre un final. Esto no puede continuar”, ha manifestado antes de remarcar que el Derecho Internacional Humanitario exige que las partes protejan a los civiles y satisfagan sus necesidades esenciales.