El portavoz de operaciones militares de los rebeldes hutíes de Yemen, Yahya Sari, ha reclamado los recientes ataques en el golfo de Adén y en el mar Rojo contra dos buques “con vínculos” con Israel y que habían “violado” su prohibición de viajar a puertos israelíes en solidaridad con el pueblo palestino en el marco de la guerra en la Franja de Gaza.
Sari ha señalado que el buque petrolero ‘Sounion’, que tiene bandera griega, “fue alcanzado de forma precisa y directa mientras navegaba por el mar Rojo y ahora corre el riesgo de hundirse” y la otra operación tuvo como objetivo el barco ‘SW NORTH WIND I’, de bandera panameña, tal y como ha indicado en un discurso publicado en su canal de Telegram.
“Las dos operaciones militares fueron llevadas a cabo por la marina, vehículos aéreos no tripulados y fuerzas de misiles, con una serie de barcos no tripulados, misiles balísticos, misiles alados y drones”, ha explicado, reafirmando su “bloqueo naval al enemigo israelí y atacando a todos los barcos asociados o pertenecientes a compañías que tratan con el enemigo israelí”.
La sección de operaciones comerciales de la Armada británica (UKMTO, por sus siglas en inglés) había informado en la víspera de que el ataque contra ‘Sounion’tuvo lugar al oeste del puerto yemení de Hodeida, cuando se produjo “un breve intercambio de disparos de armas pequeñas” entre pequeñas embarcaciones y posteriormente, fue alcanzado por tres proyectiles no identificados. Esto provocó un incendio y que el buque perdiera potencia de motor, quedando a la deriva.
Posteriormente, el capitán de ‘SW NORTH WIND I’ denunció un total de cinco explosiones a lo largo de un día que no llegaron a impactar en el buque, si bien tuvieron lugar en el agua en las proximidades del mismo.
Los hutíes, que controlan la capital yemení, Saná, y otras zonas del norte y el oeste del país desde 2015, han lanzado varios ataques contra territorio de Israel y contra buques con algún tipo de conexión israelí a raíz de la ofensiva desatada contra Gaza tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Asimismo, han atacado buques y otros bienes estratégicos estadounidenses y británicos en respuesta a los bombardeos de estos países contra Yemen en una intervención que Washington y Londres fundamentan en su voluntad de garantizar la seguridad de la navegación en el mar Rojo, el golfo de Adén y el océano Índico.