Lo más enternecedor. El velerista peruano Stefano Peschiera, quien recientemente hizo historia al obtener la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024 en la modalidad de ‘vela dinghy masculino’, protagonizó un emotivo momento a su llegada a nuestro país este lunes 12 de agosto.
Apenas desembarcó en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, el deportista de 29 años sorprendió a sus amigos, familiares y fanáticos con un noble gesto: colocó su preciada medalla de bronce a su nana, una figura clave en su vida, y se tomó una foto con ella en un acto lleno de gratitud y afecto.
Este significativo momento tuvo lugar en medio de una calurosa recepción por parte de cientos de compatriotas que se congregaron en el aeropuerto para celebrar el histórico logro del atleta. Entre banderas, música y baile, los asistentes, incluidos numerosos niños y escolares de diversas instituciones, se unieron en una festiva bienvenida para Peschiera y sus compañeros de equipo, María Belén Bazo y Alonso Correa.
¿Qué dijo Stefano Peschiera a su llegada de Francia?
En otro momento, visiblemente emocionado, el deportista Stefano Peschiera también mostró su medalla de bronce a la multitud antes de abrazar a su familia y dirigirse a la prensa. “Estoy totalmente emocionado, cansado del vuelo, pero las energías afloran. Estoy muy orgulloso de poder representar al Perú y esta medalla es para todos ustedes”, expresó. Subrayó que este logro no es solo suyo, sino de todo el país, destacando la importancia de la unión y el esfuerzo colectivo para alcanzar grandes metas. “El Perú se merece esta medalla y estoy muy emocionado de seguir ganando algo. Sin Dios y mi familia no estaría acá”, añadió, en agradecimiento a quienes han apoyado su carrera.
Además, el velerista expresó su deseo de que esta medalla inspire a las nuevas generaciones y promueva el desarrollo del deporte en el Perú: “Esta medalla es de ellos y ojalá pueda ser el instrumento para que los pequeños crezcan. Espero que la medalla de bronce abra las puertas y normalicemos el deporte en el Perú”, señaló con esperanza.
Este logro es especialmente relevante, ya que marca el retorno de Perú al podio olímpico con una medalla de bronce después de 32 años. Para Stefano, este triunfo es la culminación de un sueño que comenzó en su niñez, cuando su abuelo le enseñó a navegar. “Esta medalla significa un sueño cumplido, un sueño que tenía desde muy chiquito. Es el fruto de un trabajo bien hecho”, compartió el velerista, recordando con emoción el momento en que supo que había logrado su objetivo.
Vale indicar que el medallista no permanecerá mucho tiempo en el país, ya que se prepara para una nueva competencia internacional en Estados Unidos. “Esta medalla es de ellos y ojalá pueda ser el instrumento para que los pequeños crezcan. Espero que la medalla de bronce abra las puertas y normalicemos el deporte en el Perú. No podemos ser menos y tenemos que luchar de igual a igual con los demás países”, mencionó a la prensa.
