Con el objetivo de evitar cortes masivos de luz en el verano, el Gobierno ya trabaja en un plan para mitigar esta posibilidad por tratarse de una época en la que se da el pico de consumo y en la que suelen registrarse problemas severos para muchos usuarios. El esquema que está en estudio incluye medidas para reducir la demanda y aumentar la oferta de energía. Este riesgo no es algo nuevo en la Argentina pero genera temor entre los funcionarios de Javier Milei por su eventual impacto político tras el fuerte aumento de tarifas que se aplicó este año.
La visión de los funcionarios, compartida por el sector, es que el problema se explica por la falta de inversión en la industria, que generó la política de atraso tarifario aplicada durante los últimos años. “No nos confundamos, estamos en emergencia energética desde diciembre de 2023, mediante el Decreto 55/2023. Sabemos que el sistema está desfinanciado y saturado, y que ante la mínima exigencia se presentan riesgos porque se generan cuellos de botella”, sostuvo, ante la consulta de Infobae, una fuente oficial.
Las preocupaciones en el mercado comenzaron a crecer luego de que se conociera el mes pasado un informe de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (Cammesa) en el que se habla de un 19% de probabilidades de no poder cubrir los picos de demanda eléctrica entre finales de febrero y principios de marzo 2025 en caso de que se den algunas condiciones.
“Es un informe habitual que hace Cammesa todos los años, y sirve a la Secretaría de Energía de Eduardo Rodríguez Chirillo para la planificación del sector”, explicaron desde un despacho oficial. En ese trabajo también está el nuevo secretario coordinador de Energía y Minería, Daniel Gonzalez, un hombre de confianza del ministro de Economía, Luis Caputo.
En concreto, en el Gobierno aseguran que “la Secretaría de Energía están realizando distintas acciones para mitigar las posibilidades de corte de suministro en todo el país, que serán informadas oportunamente”. Muchas de esas iniciativas ya comenzaron y otras se encuentran en estudio.
Chirillo repitió en varias oportunidades que el retraso tarifario de los últimos años implicó un consumo desmedido de los hogares y un “riesgo de colapso” para el sistema. La quita de subsidios y los aumentos en los servicios públicos, tanto de luz como de gas, podrían ayudar a reducir los riesgos de cortes masivos. Sin embargo, se mantiene en análisis si habrá nuevos incrementos en los próximos meses debido a que Caputo busca un equilibrio entre el ajuste fiscal, la desaceleración de la inflación y el castigado bolsillo de los usuarios.
En ese sentido, Energía lanzó una línea de financiamiento para la compra de electrodomésticos de mayor eficiencia energética por hasta 24 cuotas sin interés y tasas preferenciales. El “Programa de Reconversión y Eficiencia Energética” está destinado a usuarios residenciales, comercios e industrias pyme.
Por el lado de la oferta energética, en vistas de la recomposición tarifaria, existe un pedido a las empresas generadoras, transportadoras y de distribución para que aceleren las inversiones en la red nacional. Por otro lado, según informó el portal especializado Econojournal, el gobierno podría postergar la extensión de la vida útil de la central nuclear Atucha I, que estaba programada para dejar de operar el 29 de septiembre, al menos hasta abril del 2025.
El consumo de energía podría llegar a los 30.700 megavatios (MW), más de 1.000 MW por encima del récord histórico registrado en febrero de este año, según el reporte elaborado por los técnicos de Cammesa. El análisis de la compañía que administra el mercado eléctrico mayorista y que es controlada por el gobierno sostuvo que si se corrobora este escenario, habrá cortes masivos de suministro eléctrico en el país. El informe destaca que “de no contar con la importación considerada y agotando las reservas operativas, será necesario realizar cortes a la demanda”.
Según el documento oficial, la probabilidad de abastecer el pico máximo con las reservas requeridas es del 80,9%, lo que deja un 19% de probabilidad de necesitar medidas operativas adicionales, como disminuir la capacidad de reservas o iniciar cortes programados de energía. Esto es lo que buscará evitar la dependencia que conduce Chirillo.