Al norte de Italia, en la provincia de Pordenone, hay una localidad llamada Casarsa donde han tenido que guardar el Grana Padano y el Parmigiano Reggiano por el aumento de robos. Esto ha sucedido concretamente en el supermercado de Eurospar, un establecimiento grande que satisface las necesidades de la compra familiar, centrándose en “productos perecederos, platos preparados y un amplio y profundo surtido de alimentos”, según explican en la web.
Concretamente, el hipermercado de Casarsa, ofrece también “minicursos diarios de cocina con chefs expertos”, tal y como afirman en su cuenta de Facebook. Esto les convierte en el primer supermercado en dotar este tipo de espacios: “Creemos que la experiencia de comprar se puede vivir en 360 grados, conociendo el origen de las materias primas que adquirimos”.
Asimismo, “la búsqueda de materias primas de alto nivel, la atención al cliente y la alta calidad” son los valores fundamentales por los que se impulsan diariamente, sumado a la pasión por la profesión y la experiencia. De esta manera, cuando se han producido estos robos y se ha verificado su aumento, han decidido guardar los quesos y venderlos bajo petición del cliente.
El departamento de quesos ha tomado medidas
En el departamento de charcutería y quesos del Eurospar de Casarsa se ofrece una variada selección de embutidos “de alta calidad”: desde los más clásicos hasta los más refinados. Particularmente, el surtido de quesos es exquisito, ya que se pueden ver frescos, curados y de cuchara “seleccionados con pasión” entre los mejores sabores del territorio, “donde la calidad de las materias primas y el dominio en la elaboración realzan su excelencia”.
A raíz del aumento constante de robos en un supermercado Eurospar, la tienda ha tomado la drástica decisión de mantener bajo llave ciertos productos de alto valor. Los carteles que se han colocado en la sección de embutidos y en el mostrador de productos refrigerados explican esta medida: “los productos Grana Padano y Parmigiano Reggiano, que naturalmente están disponibles”, quedarán “a pedido de nuestro personal”.
De igual manera, en el mismo cartel informativo se disculpan ante el cliente, pero ante este hurto continuado, se han visto “obligados a no exponer más los productos”. Así, se han distribuido varias copias de la nota informativa por los escaparates frigoríficos. Sin embargo, lo que sí se ha notado ha sido el incremento de impresiones con una cámara, para recordarle a los “ladrones de queso en acción” que la zona está “sujeta a videovigilancia por razones de seguridad”.
Además, los habitantes italianos, siendo el tercer productor de queso de la UE con 1,3 millones de toneladas al año. Pero lo más llamativo sin duda es la cantidad de consumo: 24 kg por habitante al año. En gran parte, esto se debe al consumo de mozzarella, el mascarpone o la ricota, pues son los quesos más típicos. Aunque, según Iberconseil, los curados, como Grana Padano o el Parmigiano Reggiano, también son de los que más se compran.
De este modo, en otros supermercados de la zona ya se han equipado con sistemas antirrobo, según Friulioggi, para evitar también que los ladrones se acerquen a los paquetes de ruedas DOP. Esto indica que el queso cuenta con las características propias del entorno natural donde se ha elaborado: ingredientes, factores medioambientales, formas de producción, según explica Iberconseil.
