Caracas, 6 ago (EFE).- Venezuela registró en julio la cifra más baja de conflictos laborales del año con 18 casos -12 menos que en junio- centrados en la exigencia de “salarios dignos”, “mejores condiciones de trabajo” y contra el “acoso laboral”, informó este martes el Observatorio de Conflictividad Laboral y Gestión Sindical del Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin).
“La campaña y posterior celebración de las elecciones presidenciales el 28 de julio incidió en una baja en el número de conflictos laborales registrados en Venezuela ese mes”, explicó el instituto a través de una nota de prensa.
El Inaesin especificó que el mayor porcentaje de reclamos fue protagonizado por trabajadores del sector educativo, con un 44,44 % del total del mes, seguido del personal de industrias básicas y el de medios de comunicación, 11,11 % cada uno.
Le siguen los reclamos de trabajadores del sector de salud, alcaldías, del poder judicial y ministerios, entre otros, con un 5,56 % cada uno.
El instituto registró que el Distrito Capital fue el estado con más conflictos, con el 50 %; seguido del estado Bolívar (sur, fronterizo con Brasil), con un 16,67 %; y Miranda (norte), con el 11,11 %.
Asimismo, señaló que el 93,33 % de los reclamos fueron hechos por trabajadores públicos, entre los cuales se encuentran los que cobran el salario mínimo, de 3,5 dólares mensuales, incrementado según la escala salarial a la que pertenezcan.
Además, perciben bonos gubernamentales por valor de 130 dólares, aunque estos no inciden en beneficios laborales, como vacaciones y liquidación.
El presidente del país, Nicolás Maduro, afirma que los bonos son parte de una fase de resistencia ante la crisis económica que generan las sanciones internacionales, que, además, han afectado la economía de Venezuela.
Pese a ello, según los últimos datos del Banco Central de Venezuela, en junio se registró 1 % de inflación, el porcentaje mensual más bajo de los últimos 12 años, lo que desde el Gobierno se considera como un signo inequívoco de la recuperación económica y de la estabilización de la moneda. EFE
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