Tras más de 30 años delante de las cámaras y del público en el teatro, Belén Rueda se ha consolidado como una de las mejores actrices de la interpretación española. Ahora se encuentra en un momento culminante de su carrera con dos nuevos proyectos a la vista. Por un lado, la película Caída libre, bajo la producción de J.A. Bayona, el director de La sociedad de la nieve, con el que Rueda ya había trabajado en El Orfanato. Por otro lado, participa en la serie Eva & Nicole, un proyecto respaldado por Daniel Écija, productor, exmarido de la actriz y padre de sus tres hijas.
Al igual que han hecho Candela Peña y Victoria Federica en las últimas semanas, la intérprete se ha sentado en los sofás de A solas con…, el podcast de Vicky Martín Berrocal, para hablar sobre la nueva serie de Atresplayer en la que comparte protagonismo con Hiba Abouk. En este encuentro, han repasado la trayectoria profesional de Rueda y han conversado sobre el momento más duro de su vida: el fallecimiento de su hija María.
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“Tenía mucha rabia contra todo el mundo”
Han pasado más de 20 años desde que la intérprete se separa de Écija con el que tuvo tres hijas: Belén, María y Lucía, siendo la segunda la que fallecía los once meses de nacer a causa de una cardiopatía congénita severa. Una situación a la que, confiesa, se enfrentó como pudo. “Pasas por fases. Al principio es negación absoluta de que eso haya ocurrido. Tienes la sensación cada día que te levantas, que va a estar. De que no puede ser verdad. Te enfadas. Tienes mucha rabia contra todo el mundo en general. Piensas que es injusto porque no es natural”, ha explicado.
Sus hijas son su mayor apoyo
La que diera vida a Lucía en Los Serrano vuelve a los cines este fin de semana como protagonista de Caída libre, una película donde interpreta a una estricta entrenadora de gimnasia rítmica de élite. En este nuevo papel encarna la vida de una mujer que experimenta un radical cambio en su existencia después de que su marido la abandona por una mujer más joven a la que ha dejado embarazada.
A sus 59 años, la ganadora del Premio a mejor actriz revelación en 2005, puede presumir de una dilatada carrera profesional, donde encadena un proyecto con otro. Contando siempre con el apoyo de sus seres queridos, especialmente de sus dos hijas, que han seguido los mismos caminos que sus padres.
Belén, inmersa en el mundo de la interpretación
A sus 29 años, Belén, la hija mayor del matrimonio, va haciendo su camino en el mundo de la interpretación y ya ha aparecido en diversas producciones de televisión como actriz, Madres y Entre Tierras, son algunas de ellas. Actualmente, se encuentra involucrada en el último proyecto de su padre, el reconocido Daniel Écija, titulado 4 estrellas para TVE. La joven, que cursó estudios en Comunicación Audiovisual, ha perfeccionado sus habilidades interpretativas en renombradas escuelas de actuación, incluyendo una estancia en Nueva York para mejorar su dominio del idioma inglés.
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Lucía, detrás de las cámaras
Lucía, de 26 años, se mantiene alejada de los focos, también está ligada al mundo televisivo, aunque lo hace desde las barreras, prefiere estar detrás de cámaras. Ha trabajado, como apunta The Objective, en la producción y dirección de varios proyectos, sobre todo de su padre, como Cristo y Rey y 4 estrellas.
