Roma, 15 may (EFE).- El italiano Jonathan Milan (Lidl Treck) volvió a exhibirse este miércoles con un gran esprint que le brindó la victoria en la undécima etapa del Giro de Italia, un recorrido de 207 kilómetros entre Foiano di Val Fortore hasta Francavilla al Mare, que mantiene al esloveno Tadej Pogacar como líder de la carrera.
Milan, un experto y ya un habitual en los grandes esprints, portador de la ‘Maglia Ciclamino’ (líder de la clasificación por puntos) cruzó la meta tras 4 horas y 23 minutos, por delante del belga Tim Merlier (Soudal Quick Step) y el australiano Kaden Groves (Alpecin), aumentando su aura de mejor velocista de esta edición con todo merecimiento.
Es la segunda etapa que gana Milan, pues ya se impuso en la tercera, el pasado 7 de mayo, y la tercera en su historia en el Giro, pues también gano una etapa la pasada edición.
Sin cambios en la clasificación general, con Pogacar oteando y controlando todo desde el pelotón, los últimos kilómetros del recorrido invitaban a una llegada al esprint que nadie evitó y que se saldó con una caída en la que ninguno de los ‘gallos’ se vio afectado.
Superada la exigencia de la etapa, en la primera parte, con la subida al puerto de Pietracatella, de 3ª categoría y 8,5 kilómetros al 5,4%, en la que mandó la fuga inicial de Edoardo Affini, Tim Van Dijke y Thomas Champion (Cofidis), que llegó a tener hasta 2 minutos de ventaja en los kilómetros iniciales, la carrera transcurrió sin mayores complicaciones.
Fue perdiendo poco a poco fuelle la fuga, protagonizada por dos de los cuatro integrantes del Team Visma-Lease A Bike, que este miércoles perdió al belga Cian Uijtdebroeks, por enfermedad, su segunda baja en lo que va de competición, pues ya perdió al neerlandés Olav Kooij por los mismos motivos.
Un ejercicio de valentía de los ‘avispas amarillas’ que finalizó a falta de 35 kilómetros a la meta, cuando el pelotón neutralizó la fuga por completo.
Llegados a los metros finales, los equipos fueron preparando a sus velocistas para la ‘volata’, en la que emergió de nuevo la gigante Jonathan Milan, de 193 centímetros, engalanado con su equipamiento violeta de ciclamino para abrirse paso con su agresivo estilo, movimientos de cuello casi lesivos y duras pedaladas.
No tuvo rival, otra vez. Solo Merlier pudo disputarle una victoria que no dejó escapar para seguir reinando en la velocidad de su país.
Pogacar, ajeno a la ‘volata’, mantuvo su condición de líder y la ventaja de 2 minutos y 40 segundos sobre Daniel Felipe Martínez.
Este jueves llega una etapa con tramos engañosos, con cuatro puertos de cuarta categoría entre Martinsicuro y Fano, de 193 kilómetros.