Al menos 57 personas han muerto y diez se encuentran desaparecidas tras las inundaciones de este pasado viernes en el oeste y en el norte de Afganistán, según han informado fuentes locales.
La provincia de Ghor, en el oeste del país, ha sido el peor escenario al registrar medio centenar de fallecidos y la decena de desaparecidos. Además, cerca de 2.000 viviendas han sido destruidas, así como 2.500 negocios. Hay daños en al menos otras 4.000 residencias, según un comunicado de la Policía provincial recogido este sábado por la cadena de televisión Ariana.
Las inundaciones, además, han incomunicado parte de la región al cortar las principales carreteras hacia Kabul y Herat.
Otras siete personas han muerto en Faryab, en el norte del país, donde las pérdidas materiales han sido “enormes”, de acuerdo con el portavoz de Gobernación, Ismatulá Moradi.
Cabe recordar que, hasta este sábado, las autoridades talibán habían confirmado en torno a 350 muertos por las inundaciones, la mayor parte en la provincia de Baglán, en el norte del país.