El cuerpo avisa, lo hace cuando está bien o cuando no lo está y es mediante los primeros signos que prende las alertas sobre alguna enfermedad. Por eso es importante aprender a oirlo y a la primera llamada de atención visitar al médico.
En esta ocasión hablaremos de dolor en el codo, cuáles son sus causas y en qué momento acudir a un consultorio médico, de acuerdo con información de Mayo Clinic, una reconocida organización sin fines de lucro especializada en salud.
El dolor en el codo no suele ser grave. Sin embargo, debido a que usas el codo de tantas maneras, puede ser un problema. El codo es una articulación compleja. Te permite estirar y flexionar el brazo, así como girar la mano y el antebrazo. Como a menudo combinas estos movimientos, quizás tengas dificultades para determinar exactamente cuál es el que te produce dolor.
El dolor en el codo, de acuerdo con Medline Plus puede aparecer y desaparecer, empeorar con el movimiento o ser constante. Podría sentirse como un dolor fuerte o agudo, o producir hormigueo o entumecimiento en el brazo y la mano. A veces, la causa del dolor en el codo es un problema en el cuello, la parte superior de la columna vertebral o el hombro.
Cuáles son las causas del dolor de codo
El dolor en el codo suele causarlo el uso excesivo o una lesión. Muchos deportes, pasatiempos y trabajos requieren movimientos repetitivos de las manos, las muñecas o los brazos. El dolor en el codo puede presentarse debido a problemas de los huesos, músculos, tendones, ligamentos o articulaciones. Ocasionalmente, el dolor en el codo puede deberse a la artritis. Sin embargo, en general, la articulación del codo es mucho menos propensa al daño por desgaste natural que muchas otras articulaciones.
Algunas causas frecuentes del dolor de codo son las siguientes:
- Quebradura de brazo
- Bursitis (Una afección en la que se inflaman los sacos pequeños que proporcionan amortiguación a los huesos, los tendones y los músculos alrededor de las articulaciones).
- Hernia de disco cervical
- Dislocación del codo
- Codo de golfista
- Gota
- Osteoartritis (El tipo más frecuente de artritis).
- Osteocondritis disecante
- Seudogota
- Artritis reactiva
- Artritis reumatoide
- Artritis séptica
- Problemas en los hombros
- Esguinces (Estiramiento o desgarro de un ligamento, que es una banda de tejido que conecta dos huesos en una articulación).
- Fracturas por sobrecarga (Grietas pequeñas en un hueso).
- Tendinitis (Una afección que ocurre cuando un tendón presenta hinchazón, es decir, inflamación).
- Codo de tenista
- Lesiones por lanzamientos
- Nervios pinzados
Cuándo acudir al médico
Es necesario acudir al médico cuando se presentan los siguientes síntomas:
- Un ángulo inusual o un cambio drástico en el codo, en especial si también presentas sangrado u otras lesiones.
- Un hueso expuesto.
- Una lesión repentina en el codo, especialmente si escuchas un crujido o chasquido.
- Dolor intenso, hinchazón y moretones alrededor de la articulación.
- Problemas para mover el codo, usar el brazo con normalidad o girar el brazo con la palma hacia arriba y luego hacia abajo y viceversa.
- Dolor en el codo que no mejora luego de los cuidados en casa.
- Dolor que se siente incluso sin mover el brazo.
- Enrojecimiento, hinchazón o dolor en la espalda que empeoran.
Autocuidado
La mayoría de los dolores en el codo mejoran con cuidado en casa, mediante el tratamiento P.R.I.C.E., que consiste en lo siguiente:
- Protect (protección). Protege la zona con un dispositivo ortopédico o una férula para evitar una lesión mayor.
- Rest (descanso). Evita la actividad que ocasionó la lesión. Luego, empieza a usar un poco la zona y a hacer estiramientos según las recomendaciones del proveedor de atención médica.
- Ice (hielo). Coloca una compresa de hielo en la zona dolorida de 15 a 20 minutos, 3 veces por día.
- Compression (compresión). Usa un vendaje, manga o venda elásticos alrededor del área para disminuir la hinchazón y proporcionar soporte.
- Elevation (elevación). Mantén el brazo elevado para reducir la hinchazón.
Prueba con medicamentos para aliviar el dolor que puedes comprar sin una receta médica. Los productos para la piel, como cremas, parches y geles, pueden ayudar. Algunos ejemplos son los productos que tienen mentol, lidocaína o diclofenaco de sodio (Voltaren para el dolor de artritis). También puedes probar analgésicos orales, como el acetaminofén (Tylenol u otros), el ibuprofeno (Advil, Motrin IB u otros) o el naproxeno sódico (Aleve).