Un grave brote de intoxicación generó alerta en la comunidad educativa de un colegio ubicado en la vereda El Tigre, zona rural del municipio de Salamina, Caldas.
En la tarde del miércoles 5 de junio, el área de vigilancia epidemiológica de la Dirección Territorial de Salud de Caldas informó que los menores afectados fueron trasladados de inmediato al hospital Felipe Suárez tras presentar síntomas como desvanecimiento, rigidez muscular y palpitaciones.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
La causa de la intoxicación fue, al parecer, producto del consumo de una mezcla de un medicamento de control especial, clonazepam, y un energizante. Según la información preliminar, los menores participaron en un peligroso “reto” que encontraron en redes sociales.
De hecho, en enero de 2024 ocurrió una situación similar en México. Niñas de secundaria se intoxicaron por ingerir clonazepam. Silvia Ugalde de la Fuente, jefa del Departamento de Secundarias de la zona en que ocurrió eso en el país extranjero informó que la intoxicación se originó por un reto viral. Según su relato, una alumna llevó ansiolíticos al plantel y los compartió con sus amigas.
Al parecer, el reto consistía en consumir tantas cápsulas de clonazepam como fuera posible y la que soportara más tiempo sin desmayarse, ganaba. No obstante, se desconoce cuál sería el video que circula dando esas “instrucciones”.
Así se encuentran los menores de edad que se intoxicaron
La Dirección Territorial de Salud de Caldas (Dtsc) fue alertada de este brote de intoxicación inicialmente en diez menores de edad, todos ellos estudiantes de secundaria. No se descarta que el número de afectados pueda ser mayor. Hasta el momento, no se han reportado fatalidades.
Los informes médicos indican que los menores afectados fueron sometidos a un monitoreo riguroso en el hospital, recibiendo tratamiento con líquidos endovenosos y atención psicológica. Afortunadamente, todos los afectados se encuentran estables y han sido dados de alta progresivamente.
“Es preocupante que la edad de los menores afectados oscile entre los 12 y 16 años”, señaló Jorge Rubio Jiménez, subdirector de la Dtsc. También hizo un llamado a la acción interinstitucional para abordar este problema de manera efectiva. Según el funcionario, se necesita una cooperación activa entre los sectores de salud, educación, medio ambiente, gobierno y justicia.
El especialista resaltó la importancia de promover hábitos saludables y prevenir el consumo de sustancias psicoactivas entre los niños, adolescentes y jóvenes del departamento de Caldas.
