La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga (PP), ha asegurado que la comunidad “no va a consentir que ninguna negociación” de la financiación autonómica “permita sacar tajada a unos pocos en perjuicio de los demás”.
Así, ha mostrado el rechazo “de pleno” de su Gobierno regional a la “bilateralidad” en las negociaciones del Ejecutivo central a raíz de la financiación singular que Pedro Sánchez ha ofrecido a Cataluña, ante la que ha advertido que los cántabros “van a reaccionar”. “Vamos a ser beligerantes al máximo y vamos a llegar hasta donde tengamos que llegar” en las instancias judiciales si la propuesta se materializa, ha advertido.
Buruaga ha hecho estas declaraciones a preguntas de la prensa tras la comparecencia que ha ofrecido este martes junto al presidente de CEOE, Antonio Garamendi, quien ha preferido no pronunciarse sobre el asunto hasta que no haya una propuesta concreta sobre la mesa.
“Me reservo la opinión del mundo de la empresa en el momento que tengamos los papeles”, ha dicho al ser cuestionado tanto por la financiación catalana contemplada por Pedro Sánchez como por la propuesta de ERC de tener un concierto económico al estilo del País Vasco, respecto a la que también ha opinado que “hay simplemente propuestas, opiniones” y “nos gustaría ver cuando llegue el tema de verdad, entonces sí que hablaremos”. “En estos momentos no ha lugar a lo que opinemos, porque es que no hay nada”, ha insistido.
Mientras, la presidenta cántabra ha lamentado que se está utilizando la financiación autonómica como “moneda de cambio para lograr el apoyo de partidos independentistas catalanes a una eventual investidura” del socialista Salvador Illa como president de la Generalitat.
“Este es un debate que emerge cada vez que los socios independentistas de Sánchez le aprietan las tuercas”, ha criticado la presidenta cántabra, para quien se da “un escenario ideal para debilitar el Estado, para disminuir los intereses generales, para quebrar el principio de igualdad de los ciudadanos exigiendo una financiación a la carta, en este caso un trato singular” para Cataluña.
Ante este escenario “la postura de Cantabria es clarísima”, y consiste en velar por que cualquier asunto que afecte a la financiación de las comunidades se negocie “entre todos” y con “el máximo consenso”.
Así, Buruaga ha pedido una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera y una previa Conferencia de Presidentes que ya ha solicitado tanto de forma individual como conjunta con el resto de presidentes autonómicos del PP “hasta en tres ocasiones”.
“Rechazamos de pleno desde el Gobierno de Cantabria la bilateralidad y cualquier privilegio, cualquier trato singular, cualquier desigualdad financiera y, por supuesto, no vamos a tolerar que se quiebre la igualdad entre los españoles, la solidaridad entre los regiones, para blanquear los privilegios y los pactos con el independentismo”. “Los cántabros no queremos ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie”, ha reivindicado.
Y es que, como ha defendido, “la financiación autonómica son hospitales, son colegios y transporte escolar, son los servicios de atención a la dependencia, son oportunidades económicas y sociales”.