Pablo Urdangarín está de enhorabuena. Confirmando que es una de las grandes promesas del balonmano español, el hijo de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín ganaba este domingo el Campeonato Mundial Universitario de Antequera 2024 en su primera convocatoria con la Selección Española de Balonmano. Y, demostrando que su proyección es imparable, se convertía en el máximo anotador y en el MPV del torneo.
Sin duda, el mejor broche de oro a una temporada de 10 y el mejor arranque soñado para unas vacaciones soñadas en las que, además de alguna escapada con su novia Johanna Zott -con la que mantiene una sólida relación desde hace un año y medio-, repartirá su tiempo entre sus padres. A pesar de su discreción, todo apunta a que pasará unos días con Iñaki y con alguno de sus hermanos en la localidad francesa de Bidart, y todavía en el aire, podría viajar a Palma de Mallorca con doña Cristina para disfrutar de una de sus grandes pasiones, la vela.
Un verano del que prefiere no dar ningún detalle, y tampoco ha revelado si entre sus planes está ver a Ainhoa Armentia, a la que ya conocen tanto él como sus hermanos Juan, Miguel e Irene. Sin embargo, sí ha reconocido que lo principal para ellos es que su padre -al que están muy unidos- esté bien, dejando entrever que si Iñaki está feliz con su pareja a ellos les parece bien.
Siempre amable, Pablo ha asegurado que la relación entre sus padres es buena tras la firma de su divorcio a finales de 2023. “Todo bien, todo está bien gracias” ha confesado, desvelando además que el noviazgo de Irene y Juan Urquijo va “bien”, al igual que el suyo con Johanna: “Yo estoy muy bien” ha apuntado con una sonrisa.